Escrito para Entre Jugadas

La gestión de Yipsi Moreno al frente del atletismo cubano será recordada por la decadencia de los resultados, por las publicitadas salidas de atletas del equipo nacional y por regresar sin medallas del Mundial de Eugene. Nada totalmente nuevo, máxime en el contexto que vive Cuba actualmente. Igual, sin ir demasiado lejos, encontramos que entre 2012 y 2016 salieron Dayron Robles, Orlando Ortega y Omar Cisneros, por solo tomar tres de los ejemplos más significativos. Antes habían salido Indira Terrero, Yeimer López, Niurka Moltalvo, Yasmani Copello, y asi, decenas. Y todos ellos también se fueron molestos; también tenían reclamos, y tampoco tuvieron respuestas oportunas y/o convincentes.

La gestión de Yipsi Moreno, y mucho tiene que ver en ello el hecho de que es la primera que se desarrolla en la era de internet, será recordada por todo eso que “las redes” han querido que se recuerde. Y si, puede que la triple campeona mundial y campeona olímpica del lanzamiento del martillo haya fracasado en su administración porque dirigir es un arte, y liderar (que difiere muchísimo de dirigir) una masa de seres humanos con sueños, egos y exigencias no es cosa fácil, pero hay un grupo de cuestiones que se han sucedido en su época que no deberíamos olvidar, principalmente porque son elementos necesarios, a los que la nueva dirección debe/debería darle continuidad.

Por ejemplo:

  • Por primera vez atletas cubanas que entrenan en el extranjero son consideradas para llegar al equipo nacional: Sahily Diago (Guatemala) y Eliani Casi (España) son pioneras de esta necesaria apuesta.
  • Por primera vez una atleta cubana, miembro del equipo nacional, logra establecer sus entrenamientos en el extranjero. Rose Mary Almanza ha estado radicada en Guatemala y ahora en Ecuador.
  • Por primera vez se rescata a una atleta que regresa del extranjero. Lisneidys Veitia salió del equipo nacional y se fue a Suiza, años más tarde, quiso volver y se le dio la oportunidad de representar a Cuba y con ella logró (logramos) el resultado más importante de su carrera: el título mundial en el relevo 4x400m en Silesia, Polonia.
  • A Ángel Rodríguez le llaman el Rey del Fondo. Por sus manos han pasado los mejores atletas de Cuba en estas especialidades en los últimos tiempos, pero, no ha sido hasta este 2022 que el profe ha llegado al equipo nacional. Tras la Copa Cuba fueron promovidos dos de sus atletas (Yumileidys Mestre y Maher Salah)y con ellos, él.
  • A Cali Valle fueron atletas de 3000m con obstáculos y en 5000m planos. Al Campeonato Nacac irán fondistas y marchistas, incluyendo alguna figura que no es miembro del equipo nacional, algo inusual por muchos años. La última participaciones que se recuerdae son de José Alberto CAIRO SÁNCHEZ y datan de 2017.
  • La gira europea de 2022 tuvo a jóvenes como protagonistas, incluyendo a Yarima García; una atleta de de 16 años del área de velocidad.
  • La Copa Cuba y el Memorial Barrientos 2022 contaron con cronometraje electrónico y reloj extraoficial a ras de pista. Tecnología Timetronic que hacia mucho tiempo no se veía, dotado, incluso, de sistema para la detección automática de las salidas en falso.
  • El confort del Loby del Estadio Panamericano es otra historia. Quien ha sido asiduo visitante a la instalación lo sabrá bien.

El cambio de mando en el atletismo cubano ha sido celebrado con vehemencia en las redes y no era para menos, cuando este había sido el principal campo de batalla contra la camagüeyana y su equipo de trabajo. Pero es importante que entendamos que si bien el cambio es muy necesario, el problema del atletismo (y del deporte cubano) es más grande y más longevo que Yipsi Moreno.

La luz no regresará simplemente porque hayamos tomado la decisión de sustituir la bombilla. Hay tanto que comprender y tantos métodos para revolucionar que, aún siendo muy audaces, nos costará varios años limpiar el daño que se ha sedimentado a través del tiempo. De más está imaginar lo que sigue, si seguimos haciendo lo mismo. Eso mejor, ni pensarlo…

A nuestro deporte hay que acercarlo al mundo en que vivimos, hay que insertarlo, hay que reinventarlo, y el cambio empieza cuando cada uno de los seres humanos que toman las mayores decisiones así lo entienda.

Al atletismo no solo le hace falta un cambio de comisionado; el atletismo necesita incorporar pensamiento empresarial a sus estructuras de dirección porque el atletismo mundial así funciona, con operaciones milimétricas en un mercado saturado de oportunidades, pero que no están al alcance de todos; un manager (o mejor varios) que hurguen en los cronogramas competitivos con cautela, buscando competencias que sean verdaderamente relevantes por su aporte a la preparación del atleta, una dirección técnica que vele por la planificación exhaustiva del entrenamiento con objetivo fijado en la competencia fundamental y apego a los elementos actualizados de esta materia, un equipo de comunicación sólido que lleve los hilos de la información con inmediatez y precisión y necesita, también, una mayor gestión del procesamiento estadístico para apoyar el análisis y la toma de decisiones.

Se trata de pensar en qué es lo mejor para este deporte, y qué podemos hacer para sacarlo adelante, y hacerlo; dejando a un lado los egos, y los dogmas.

Si usted lo duda, revisemos a simple vista las fórmulas que hay detrás de la sonrisa nacional que produjo en la madrugada del 31 de julio el regreso del Voleibol Masculino cubano al escenario competitivo de la élite mundial y saquemos las necesarias conclusiones. Emprender contra Yipsi Moreno es más un ajuste de cuentas, que la solución que necesitamos los que tenemos en el pecho un corazón que vibra a ritmo del campo y pista y que soñamos con su re-establecimiento al más alto nivel.