Por Lilian Cid

sta imagen me conmueve, Siffan Hassan también.

La etiope devenida neerlandesa lleva una línea de tristeza en su mirada que me sensibiliza. Quizás viene de lo que ha sido su vida, de cómo ha construido su historia, o por cómo se han desarrollado los hechos. Quizas son solo ideas mías pero no puedo evitarlo.

A ella, a Siffan, le gustan los retos, quizás demasiado, pero les planta cara y no se esconde. Eso es valentía, aunque alguna que otra vez lo confundamos con locura.

Esta caída a escasos metros de la meta en la final de los 10 mil metros planos fue uno de los highligts del Día 1 del Campeonato Mundial de Budapest. Fatídico desenlace para una carrera que parecía que ganaba. Otra ruta de esas en las que sale del fondo del grupo para tomar la punta. Otra oportunidad para mostrar al mundo que su estilo es exitoso, para poner una buena piedra en el engorroso camino de imposibles que ella misma ha decidido transitar.

Siffan Hassan es peculiar. Ríe lo justo, no habla en exceso y rara vez ha celebrado con vehemencia sus múltiples y hasta surrealistas victorias. En su mirada comulga el oro de decenas de sonrisas y el polvo de las tierras y las guerras que tuvo que dejar atrás.

De ayer cuentan que estuvo muchos minutos en zona mixta, a pesar de los rasguños que sangraban y del corazón, que seguramente, acusaba. Y tuvo palabras para todos y cada uno de los medios acreditados. También prefirió no impugnar la carrera, en su filosofía entiende que perdió, y eso es todo lo que vale.

Los 10 mil eran probablemente su mejor opción, o al menos la única prueba en la que no tenía que lidiar con ese torbellino que se hace llamar Faith Kypyeon. Otra, en su lugar, quizás habría renunciado a seguir.

Por delante tiene tantos metros por recorrer que nos asustan solo de pensarlos.

Pero Siffan Hassan es una guerrera, de las de verdad, de las que vuelven una y otra vez, sin miedo, a la batalla. Hoy ya la vimos, vendada y colgada de su inquebrantable fe en sí misma y en esas batallas que solo caben en su cabeza.

Lo próximo será la final de los 1500m para damas. La segunda que dispute en Budapest. Sea cual fuere el resultado, le dejo mis respetos.