liga-mundialEl criterio de no participación en la Liga Mundial y el Grand Prix 2017 está vinculado, en primer orden, a la implementación de una política acorde con las posibilidades económicas de la Federación Cubana de Voleibol, equilibrada al actual rendimiento de sus selecciones nacionales y el cumplimiento de los propósitos competitivos en las últimas cuatro ediciones de estos certámenes (2013 -2016), los cuales han tenido saldos desfavorables.

En ambos eventos los balances pago de inscripciones-ingresos han sido negativos debido a los bajos rendimientos que impidieron resarcir las erogaciones necesarias.

Súmese a eso que las venideras ediciones exigieron pagos por anticipado de las inscripciones (75 000 USD el Grand Prix y 250 000 USD la Liga Mundial), antes del 30 de octubre del presente año, ocasionando una situación fuera de nuestras posibilidades actuales.

De igual forma, como elemento de mayor peso en los análisis, hemos tenido en cuenta que las actuales composiciones de nuestros equipos nacionales no permiten vaticinar desempeños favorables inmediatos a esos niveles.

Valga recordar que los promedios de edad de ambas preselecciones no rebasan los 22 años de edad y lo necesario de la renovación, sobre todo en el sector femenino, a partir de la existencia de jugadores que no han cumplido su papel dentro del equipo.

La estrategia, por tanto, será iniciar el nuevo ciclo con los esfuerzos concentrados en la participación de tres selecciones masculinas en campeonatos mundiales a disputarse en el 2017: categorías Sub-19, Sub-21 y Sub-23, además de los eventos continentales programados.

Se incluyen los clasificatorios a los campeonato mundiales 2018 de mayores, en los cuales Cuba ya aseguró presencia en la segunda fase, así como el desarrollo de los atletas de manera escalonada y según sus niveles de rendimiento, sin violentarle etapas, tanto en los órdenes competitivo como educativo, otro factor identificado como prioridad.

En el sector femenino se espera la clasificación al mundial Sub-23, donde tanto la edad biológica como el nivel de rendimiento están más cerca de la actual composición de nuestra preselección nacional, mayoritariamente integrada por jugadoras necesitadas de formarse y crecer sin pasar sobre las etapas que le son inherentes.

Para el primer año del ciclo olímpico se mantiene igualmente en perspectiva la participación en la Copa Panamericana, clasificatoria al Grand Prix del año siguiente, paso que estaría sujeto a los análisis técnicos correspondientes, atemperados a la situación reinante en el momento de tomar la decisión.

En tal sentido es oportuno aclarar que la posibilidad de regresar al año siguiente, si consigue la plaza, es una facilidad existente hoy para cualquier país que decide salir temporalmente del Grand Prix.

Cuba pretende además organizar el próximo año la Copa Panamericana Sub-20, que nos facilitaría foguear a una generación de atletas nacidas entre los años 1998 y 1999, lo que unido al mundial Sub-23 aportaría al desarrollo de su rendimiento individual y colectivo.

Es importante subrayar que como política mantenemos la aspiración de seguir participando en Ligas Mundiales y Grand Prix en los próximos años, en correspondencia con las garantías de desarrollo técnico y económico correspondientes.

Pero también son imprescindibles los análisis objetivos y críticos de nuestras posibilidades y aspiraciones, de forma que podamos llegar a contar con un voleibol sostenible.

No podemos estar de espaldas al carácter comercial de estos eventos ni desconocer la necesidad de enfrentar el trabajo a partir de las opciones que nos asigna el presupuesto de que disponemos.

De igual forma se impone educar a nuestros jugadores en el sentido de responsabilidad y pertenencia, dejando claro que participar en estos eventos va más allá de jugar por jugar, e implica la responsabilidad de defender el nombre de Cuba desde la entrega y el constate esfuerzo por una actuación siempre superior.

Por último, aprovechamos para informar que como reconocimiento a los resultados alcanzados por el voleibol de playa en los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro existe la voluntad de priorizar su participación en el tour mundial 2017, paso también requerido de una alta inversión.