Por Dr. Misael Salvador González Rodríguez (Investigador de la Federación Cubana de Boxeo)/Especial para DeporCuba.
El boxeo según los análisis documentales, llega a Cuba desde los Estados Unidos, en la primera década del Siglo XX. En el año 1910, el chileno John Budinich, introduce esta práctica deportiva, después de haber realizado su carrera pugilística en Estados Unidos. Este exboxeador comparece en la Habana para ofrecer los servicios en defensa personal con tropas militares. Algunos meses después, se crea en la capital, la primera Academia de Boxeo, en agosto del 1912, donde se organiza la primera pelea de boxeo.
A partir del triunfo revolucionario de 1959, el deporte cubano experimenta nuevas proyecciones sociales, precisándose el deporte como derecho del pueblo. En este sentido, el 14 de enero del 1959, se crea la Dirección General de Deportes (DGD), dos años más tarde, es decir, el 23 de febrero de 1961 nace el Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER), organismo central de estado que planifica, desarrolla, y registra el movimiento deportivo cubano.
Es decir, que durante 50 años en Cuba no se hacía practica profesional del boxeo, tiempo que trascurre desde 1962 al 2013, esta condición queda abolida el día 1 de junio del año en curso, cuando Karim Bouzidi, director general de la Serie Mundial de Boxeo WSB, y Alberto Puig de la Barca, presidente de la Federación Cubana de Boxeo, firmaron los términos del protocolo de incorporación de nuestro país en la Serie Mundial de Boxeo (WSB)
Este tipo de actividad competitiva, es un torneo profesional, donde los deportistas realizan el combate sin cabeceras, con un sistema de puntuación regido en el boxeo profesional, es decir (tres jueces, un referí y un supervisor). El sistema de puntuación es el convencional para los combates profesionales, con votación de (10 x 9), y como regla distintiva, los boxeadores deben ser mayores de 18 años de edad y menores de 35.
Para enfrentar con éxitos estas nuevas exigencias competitivas, los boxeadores del Centro de Entrenamiento del Equipo Nacional Cubano de Boxeo, deberán recibir diferentes gestiones metodólogas para la preparación, estudios médicos, y psicológicos, pues tendrán que pelar bajo la regla de cinco asaltos (rounds) de tres minutos, por uno de descanso.
La modalidad competitiva es del tipo enfrentamiento por equipo, en el cual, los que mayor cantidad de victorias alcancen, ganan la velada, acarreando a su favor tres puntos. El perdedor se le anota un punto, si pierde 3 a 2.
Los estudios de cineantropométricas, estilos preferentes de combate, y la dirección de las cargas de entrenamiento ajustadas al rendimiento, deberán modelarse atendiendo a las nuevas exigencias de divisiones o categoría de peso en la que se competirá en la Serie Mundial de Boxeo (WSB), que serán: 49 kg, 52 kg, 56 kg, 60 kg, 64 kg, 69 kg, 75 kg, 81 kg, 91 kg y más de 91 kg
En este sentido, los países que participaran en la Serie Mundial de Boxeo (WSB), serán organizados por grupos, A, B y C, donde los mejores cuatro equipos de cada uno de los grupos avanzarán al play off y se enfrentarán el 1º del Grupo A vs el 4º del Grupo B, el 2º del A vs el 3º del B, y así sucesivamente.
La cuarta edición de la Serie Mundial de Boxeo (WSB), se inicia el día 15 de noviembre del año en curso, donde Cuba, participará con sus boxeadores, entrenadores y directivos nacionales.
La selección que conquiste el título ganará un premio de 500 000 dólares que, al decir de Karim Bouzidi, pues cada país tiene autonomía para distribuir los ingresos.
A modo de conclusión indicaríamos, que el problema de los problemas es la tarea de preservar la armonía alcanzada en la selección, preparación y resultados competitivos de los boxeadores cubanos, que antes los nuevos escenarios competitivos, si no se utiliza el método científico como fórmula de trabajo estaremos al borde del abismo.
Se necesita hoy realizar urgente, un congreso del deporte, reuniones con los boxeadores cubanos, retirados y activos, sus entrenadores, médicos, paramédicos, y científicos, pero este tipo de encuentro se prolongan y las realidades edulcoradas se alejan.
¿Por qué se acostumbra siempre a pintar un escenario negro a raíz de cualquier cambio? ¿No sería más lógico esperar por los resultados y las consecuencias para poder valorar justamente el alcance de los mismos?
Hay cambios que no conducen a nada bueno, otros que sí aportan algo positivo, pero en general toda experiencia trae consigo un mensaje y es que siempre se aprende algo nuevo hasta de las experiencias negativas.
Mientras más tiempo vive una persona más experiencias acumula, pero al mismo tiempo la dosis de fatalismo puede aumentar. No todas las cosas nuevas son negativas, a pesar de que se puede dudar ciertamente de la eficacia de este u otro cambio, pero la respuesta solo la tiene el futuro.
Cuando se comparan los resultados de los atletas cubanos actuales con los de generaciones anteriores no me puedo imaginar que el abismo esté tan lejano.
En Cuba se acostumbra a medir todo a partir de los resultados de los Juegos Panamericanos, para poder seguir diciendo que Cuba ocupa en segundo lugar en toda América, solo superada por los EE.UU. Para lograr esto se entrena a los atletas tomando como meta alcanzar el pico de rendimiento ese día X durante los Panamericanos, pero se excluye la posibilidad de alcanzar el rendimiento máximo el día X en un Mundial de la disciplina deportiva.
Para lograr esos fines se promueve o permite la participación de atletas con lesiones, a sabiendas de que puede costarle la carrera deportiva. Si esas no son señales de estar al borde del abismo, entonces, ¿por qué han de serlo el hecho de que unos boxeadores participen en una competencia profesional?
Todo deporte de alto nivel trae consigo un desgaste físico mayor que el de una persona de vida normal. La posibilidad de las lesiones en determinadas regiones del cuerpo son mayores también a consecuencia de un entrenamiento específico. Los deportes de combate no son la excepción.
Pero yo no creo que por competir como profesionales sin la de protección de cabeceras aumente en tanto los riesgos de las lesiones. Si así fuera entonces los boxeadores profesionales solo combatirían una vez, un mes, o un año o quizás dos, porque al año siguiente estarían todos lesionados.
Mucho más importante que empezar a dibujar el diablo en la pared, me parece el aseguramiento del deportista en caso de lesiones, así como la justa remuneración en caso de vencer. No sea que suceda lo que ya sucede en otros deportes que no se premia el esfuerzo pero después se difama al atleta como traidor, se le sanciona, y esto solo por haber expresado el deseo de ganar dinero como trabajador del deporte en el extranjero.
El profesor Dr. Misael hace una importante caracterización del boxeo y la seria mundial de boxeo, interesante, no sé a qué viene ese comentario de Roberto, usted no leyó bien, analice, en lógica la precisión, nos convoca a seguir utilizando el método científico como fórmula de trabajo en la dirección pedagógica del boxeo para seguir manteniendo el boxeo triunfal
El profesor Dr. Misael hace una importante caracterización del boxeo y la seria mundial de boxeo, interesante, no sé a qué viene ese comentario de Roberto, el que ve males es el, analice bien, en final algo lógico, nos combo Ica a seguir utilizando el método científico como fórmula de trabajo en la dirección pedagógica del boxeo para seguir manteniendo el boxeo triunfal