Yarisley Silva está en el ojo del huracán. Y cuando digo huracán, me refiero a la atención mediática tras convertirse en el referente del atletismo cubano. Por lo hecho, la pinareña trasciende, mucho más en Cuba con esa suerte de rol, ya certificado, pero también en el mundo, gracias a sus medallas, a su constancia en materia de resultados y por supuesto, a ese salto de 4,90 que se gastó en Hengelo durante un 2013 que terminó de catapultarla a la órbita de las fantásticas, completando el trío de mujeres que han sido capaces de superar dicha altura. Que se dice fácil, pero tanto Yelena Isinbayeva como Jennifer Suhr pueden dar cuentas de su privilegio, mientras otras de “alto standing” como Fabiana Murer, Silke Spiegelburg y Svetlana Feofanova (por citar ejemplos) aun no son capaces de testificar sobre las sensaciones que produce conquistar tales cifras en una práctica como esta, el salto con pértiga, tan cercana a la acción que todos conocemos como volar.
Silva lo entiende, aunque no se imagina interpretando el papel de super estrella. Asume el compromiso con la seriedad que le caracteriza, y se exige mucho. Más cada día, hasta que su rostro se torna incapaz de disimular el desgaste físico que se acumula al final de cada jornada de entrenamientos.
Yarisley Silva Rodríguez es la primera mujer latinoamericana que logró subirse a un podio olímpico del salto con pértiga, y es, por ende, la primera cubana en inscribir su nombre entre las medallistas de los principales eventos en dicha especialidad, como los propios Juegos Olímpicos y también, el campeonato mundial en cualquiera de sus versiones.
Es una atleta única, que ha bregado entre enormes sacrificios y luchado, incluso contra la falta de confianza, por sus sueños que han sido el motor de cada una de sus conquistas.
Dos mil quince es un año complejo para el atletismo, con campeonato mundial incluido. Una temporada preolímpica que para Yarisley llega con una doble misión: recuperar posiciones y estabilizar resultados.
En Fotos les dejamos una muestra de cómo la Campeona Mundial bajo techo de Sopot 2014 interpreta su guión diario. Una escaleta de autosuperación que tiene la temporada de verano como objetivo inmediato y que fluye, bajo una máxima muy suya que no admite límites, cuando se trata de hacer los [sus sueños] realidad.
Le deseo muchos éxitos junto a su preparador en la temporada veraniega.
Sí, es referente del atletismo cubano actual porque excepto Yarelis Barrios, Yarisley es la única que viene ganando medallas internacionales ininterrumpidamente desde el año 2011.
Saludos