Andres Simón_deporcuba (2)Por: Lilian Cid Escalona/ Escrito para CubaxDentro

Y conocimos a Andrés Simón. Es lo que tiene acudir a competencias como el Memorial Barrientos y la Copa Cuba. Siempre hay espacio para citarse con la historia  y burlar los años rememorando, de la mano de los protagonistas, pasajes icónicos en el rico legado del campo y pista cubano.

Andrés Simón fue un velocista de cabecera, en tiempos donde la velocidad  era un área pródiga. Gustaba de los 100m, pero adoraba los 60m. En esta última distancia se tituló, en 1989, durante el 2do Campeonato Mundial bajo techo de Budapest. Tres años más tarde, en los –para Cuba, excelsos- Juegos Olímpicos de Barcelona’92 fue parte, el arrancador, en el relevo 4×100 que conquistó la presea de bronce.

El registro con que la cuarteta formada por Joel Lamela, Joel Isasi, Jorge Luis Aguilera y Simón se encaramó en el podio se sostiene como récord nacional para dicha prueba. Los 38.00 segundos que persiguen mejorar los actuales exponentes de una posta corta que promete. Un criterio que comparte Andrés y lo comenta mientras disfruta inquieto de la semifinal de los 100m.

“Estos muchachos son muy buenos –repite una y otra vez-, son mejores que nosotros”

Se dice que pueden rebajar el récord nacional –comento y de paso me introduzco en la dinámica de entrevistadora-

“Claro que nos pueden superar. Individualmente todos tienen mejores condiciones.”

“Pueden bajar de los 38 segundos, pero tienen que hacer muchos cambios, practicar el relevo. Ahí fue donde nosotros ganamos la medalla olímpica” -sentencia-.

¿Ha cambiado mucho la preparación que realizaban en su tiempo al entrenamiento de hoy?

Si, un poco. Por ejemplo, ya no se hacen tantos tramos reiterados de 25, 40, 60 y 80m como hacíamos nosotros pero creo que lo que hace la mayor diferencia la hacen las competencias. Nosotros teníamos muchas posibilidades de competir en Europa, de medirnos a otros atletas y ellos no, ellos compiten poco.

Andrés Simón tiene 55 años, y llegó al atletismo tarde, con 23 años, al regresar de la misión internacionalista que cumplió en Angola. Se lamenta por ello, aunque agradece el haber llegado.
¿Cómo recuerda usted los años en el alto rendimiento?

Fueron años muy lindos. Un tiempo que nunca olvidaré porque yo disfrutaba mucho  correr, sobre todo los 60m.

¿Lo disfruta más desde la grada? 

Aquí sufro. Son muchas sensaciones las que experimento cada vez que veo una competencia, sobre todo de 100m. Me pongo muy nervioso, más que si estuviera en la pista. Es más difícil verlo desde fuera. No me puedo estar tranquilo. Yo siempre me sentiré atleta.

¿Qué hace Andrés Simón hoy?

Entreno niños en el Estadio Pedro Marrero. Tengo formación como técnico en fisioterapia pero me he quedado enseñando.

En algún momento soñé  o pensé con formar campeones y tener un resultado pero con los niños he aprendido mucho. Me han hecho revivir una niñez que yo no tuve, porque empecé tarde en el atletismo. Esos años los estoy viviendo ahora junto a ellos. Y de paso, les aporto desde mis humildes conocimientos a su formación como futuros campeones. 

De las figuras que hoy son protagonistas en la velocidad, ¿tiene preferencias?

Estos muchachos –insiste sobre los cubanos Reynier Mena, Yaniel Carrero y Roberto Skyers – son muy buenos. Tienen condiciones para mostrar sus cualidades al mundo. 

Internacionalmente Usain Bolt por supuesto. El hombre no se puede olvidar. Es el mejor del mundo y un atleta que transmite confianza porque está muy seguro de sí mismo y a su vez, disfruta de lo que hace. 

El momento deportivo que nunca olvidará…

 

Andres Simón_deporcuba (1)Cuando le gané a Carl Lewis. Fue en España, en San  Sebastián, en febrero de 1989 en una competencia de 60m. Si te soy sincero, yo nunca pensé que le podría ganar pero sucedió. Recuerdo que en la carrera hubo una arrancada en falso de Joel Issasi y eso condicionó un poco las cosas. Cuando llegué a la meta, la gente me decía que había ganado y yo seguía sin poder creerlo. Estuvimos como 30 minutos esperando el resultado oficial y cuando vi aquello me sentí verdaderamente feliz y empecé a saltar. Creo que corrí más fuerte celebrando que en la carrera (sonríe).

Más allá de  la medalla olímpica y el titulo mundial, esa competencia no se me olvidará jamás.

Sucedió, en efecto, en tierra vasca. El cubano Andrés Simón corrió 6.58 segundos para imponerse al llamado “Hijo del Viento”. Ese dia Lewis fue tercero con 6.60 segundos, por detrás Mark Witherspoon (6.59). Según los datos que recoge la IAAF, el mejor rendimiento del cubano para los 60m, fue de 6.52 segundos durante la carrera que lo convirtió en campeón del orbe. En el hectómetro le aparecen acreditados 10.06 segundos.

¿Y cómo era la rivalidad?

Era sana. Salíamos a la pista a correr y mejorar nuestros tiempos. Fuera de eso, teníamos muy buena relación.

Se le recuerda en Cuba por sus victorias. El ser parte de una generación de atletas con una cosecha importante de éxitos en la arena internacional siempre hace que el legado perdure.

¿Qué mensaje le envía a quienes lo siguen?

Siempre agradezco al pueblo, porque a pesar de los años, en cada esquina encuentras a alguien que te reconoce, recuerda tus carreras y te hace soñar nuevamente.