Por: Andy Lans García/Deporcuba

Cuando de grandes beisbolistas pinareños se habla, sentencio sin temor a equivocarme que uno de los más completos ha sido Yobal Dueñas Martínez. En una época donde las estrellas inundaban los equipos de la más occidental de las provincias cubanas, Yobal Dueñas supo conquistar su puesto en las alineaciones vegueras.

Yobal ¿Cómo rememoras tus inicios en el béisbol?

“Lo recuerdo con mucho sacrificio, pero con hambre de jugar pelota. Desde pequeño me sabía los line up de los 16 equipos participantes en las Series Nacionales de aquel momento, incluyendo Forestales, Citricultores y Metropolitanos.”

¿A quién tenías por referencia en Cuba?

“Mis dos hermanos (entre ellos, Pedro Luis Dueñas) siempre me inspiraron. Admiraba a Fernando Hernández, Omar Linares, Luis Giraldo Casanova, Alfonso Urquiola, Giraldo González, pero mi mayor ídolo era Lourdes Gourriel.”

A lo largo de 14 campañas en nuestros clásicos domésticos, Yobal Dueñas conectó un total 1615 imparables para un average de 321. Muestra de su versatilidad resultan sus 136 jonrones y 133 bases robadas. Anotó 837 carreras e impulsó 763. Recibió 351 boletos para un porcentaje de embasado (OBP) de 377. Exhibe una frecuencia aproximada de un ponche cada 15 comparecencias al plato.

¿Qué significó para ti integrar ese brillante Pinar del Río en la década de 1990?

“Cuando estudiante, me fugaba de la EIDE (Escuela de Iniciación Deportiva) Osmani Arenado para ver a todos esos grandes peloteros que ya mencioné. Soñaba con defender a Pinar y se me cumplió. Recuerdo que en mi primera Selectiva empecé de noveno bate y terminé de quinto por detrás de, los que para mí son los dos mejores jugadores cubanos, Linares y Casanova.”

Yobal Dueñas obtuvo dos títulos de campeón con Pinar del Rió en las temporadas comprendidas entre 1996 y 1998. Sin embargo, en la 1998-99, el vueltabajero terminó líder de los bateadores con promedio de 418 y encabezó las bases intencionales recibidas con 17.

¿Hiciste alguna preparación específica para la edición 1998-99 de la Serie Nacional?

“Por muchos años me preparé duro. Era de los primeros para todo en el plano físico. Luego de entrenar, seguía con ejercicios y no descansaba. Entonces, en la preparación de esa Serie, me dediqué a descansar al menos dos horas diarias luego de las prácticas, para asimilar la carga de trabajo. Esa fue la base de mi rendimiento durante los 90 partidos.”

La buena forma de Yobal, le llevó a disputar la Copa Intercontinental de ese año, en la que mostró línea ofensiva de 371/378/486. Defendió el jardín central, robó 5 almohadillas en igual cantidad de intentos y empujó 9 rayitas. Sin embargo, Cuba perdió la final en extrainnings contra Australia 4×3.

Dueñas también participó en los Panamericanos Winnipeg 1999, donde la Mayor de las Antillas se clasificó a las Olimpiadas Sídney 2000 tras ganar el oro, pero su mayor privilegio consistió en de formar parte del enfrentamiento del elenco cubano con la franquicia de Grandes Ligas Orioles de Baltimore.

Háblame de tu experiencia ante los Orioles…

“Constituyó una enorme vivencia para mí, aunque me presioné demasiado. Fidel Castro iba a ver los entrenamientos y eso me ponía tenso. Además, me afectó el cambio al bate de madera. Creo que fui el máximo responsable de que perdiéramos el primer choque ante los Orioles porque tuve la oportunidad de impulsar 4 o 5 carreras y no pude.”

¿Cuánto caló en Yobal Dueñas la derrota de las Olimpiadas del 2000?

“Ser Campeón Olímpico, o ganar una Serie Mundial de MLB, constituye lo más grande para un pelotero. No asistí a Atlanta 1996 porque a pesar de mis buenos números, solo jugaba segunda y tenía por delante a Antonio Pacheco y a Juan Padilla. Por eso en el 2000, perder ese chance me dolió bastante.”

¿Imaginaste que la Copa Intercontinental de 2002 sería tu último evento internacional?

“Sí. Desde antes pensaba en abandonar el país para mejorar mis condiciones de vida. A pesar de mi desempeño, nunca me asignaron un auto, y cosas como esas causan varias desmotivaciones que desencadenan la decisión de irme. Mi familia pasaba necesidad y no podía ayudarlos. Entonces pensé que en el momento deportivo en que me encontraba, podría sacar adelante a los míos y, gracias a Dios, puedo trabajar humildemente para costear sus gastos allá en Cuba.

Por otro lado, anhelaba probarme en la MLB. En aquel tiempo, al no representar yo un salario elevado para la organización, no conté con opciones de llegar al máximo escenario.

Yuliesky Gourriel salió con la misma edad que yo y triunfó. No obstante, ya varios antes de él demostraron la calidad de la pelota cubana, amén de que el “Yuly” lució en la arena internacional.”

Yobal, dijiste en otras ocasiones que no debiste firmar con los Yankees de Nueva York. Si se te diera de nuevo la oportunidad ¿A dónde hubieras ido?

“Luego de ver cómo funciona este béisbol, iría a los Dodgers de Los Ángeles o a un equipo pequeño como el Tampa Bay para manifestar mi calidad.”

Descríbeme tu paso por la pelota mexicana…

“Llegué a México muy débil mentalmente. Me sentía frustrado por no llegar a la Gran Carpa. Vi como a peloteros de excelentes números los invitaban a los campos de entrenamiento, y al final, no los escogían. Por esa razón opté por empacar mis cosas y venir a Estados Unidos a trabajar.”

Tuviste problemas con la justicia, sin embargo te levantaste. ¿Qué mensaje le enviarías a los jóvenes cubanos?

“Andar con personas que no te reportan nada positivo conlleva a cometer errores. Me levanté porque siempre lucho y el verdadero valor se impone desde el piso. Entonces, retomé el béisbol que es lo que sé hacer, para dedicarme a formar a las nuevas generaciones.”

¿Cuánto representa en lo espiritual para Yobal Dueñas, el entrenar a los niños?

“Todos los días aprendo con ellos. Me enorgullece que después de los juegos del fin de semana, los padres me llamen el lunes para ratificar sus regocijados estados de ánimo. Trato de transmitirles valores, y de que a la mayoría les abran las puertas en las organizaciones. Ya más de uno ha firmado, con la posibilidad de frecuentar el colegio gratis.”

¿Qué le dices a la gente en Cuba en tiempos de pandemia?

“Que se queden en casa para no propagar más la epidemia, pero que a la vez, administren la cantidad de información que consumen respecto al virus, no vaya a ser que caigan en una paranoia. Oren, tengan fe y confíen en Cristo.”