Por Eddy Luis Nápoles Cardoso

En la primera prueba disputada durante la novena jornada, la maratón, entre las mujeres, en una carrera, donde, 48, de las 73 que cruzaron la meta, realizaron el mejor desempeño de esta temporada. Kenya logró coronar el 1-2, con una épica carrera de Peres Jepchirchir (2:27:20) y Brigid Kosgei (2:27:36), dejando el tercer puesto para la estadounidense Molly Seidel, con 2:27:46 horas. Las locales Mao Ichiyama (2:21:11), Honami Maeda (2:23:30) y Ayuko Suzuki (2:28:32), candidatas al podio, quedaron relegadas a puestos secundarios, Ichiyama (2:30:13), octava; Suzuki (2:33:14), decimonovena y Maeda (2:35:28), trigesimotercera. La peruana Gladys Tejeda, con 2:34:21, que participó en su tercera maratón olímpica, fue la mejor latinoamericana ubicada, con el puesto 27.

El título de Jepchirchir, es el segundo de Kenya en esta prueba, antes lo había conquistado Jemima Jelagat Sumgong, en Río 2016.
La holandesa Sifan Hasan, finalmente pudo concretar sus aspiraciones, de llevarse dos títulos en Tokio 2020, al ganar los 10000 metros en esta jornada. A los compases finales de la prueba llegaron las tres corredoras con mejores tiempos esta temporada, la etíope Letesenbet Gidey, dueña del récord mundial (29:01.03); Hassan la anterior recordista (29:06.82) y la bareiní Kalkidan Gezahegne (29:50.77), pero Hassan, conocedora del desgaste de Gidey, atacó, sin respuesta, a falta de unos 150 metros, para llegar vencedora, con 29:55.32; mientras, Gezahegne (29:56.18), también desbordaba a Gidey (30:01.72). El título de Hassan, es el primero para Holanda en esta prueba, cuyo mejor resultado, era el quinto puesto de Lornah Kiplagat en Atenas 2004. Sifan Hassan pasará a la historia del atletismo olímpico, al tratar de realizar un triplete (1500, 5000 y 10000), logrando un doblete (5000 y 10000) y bronce en 1500 metros.

En el salto de altura, la rusa Mariya Lasitskene (2.00), se vio en apuros sobre 1.96, con dos nulos, pero se recompuso, saltando 1.98 y 2.00 metros en el segundo intento, para tomar el liderato de competencia, con 2.02, altura que logró en su segunda oportunidad, la australiana Nicola McDermott (2.01), luego Lasitkene se reafirmó, con 2.04 (xo). McDermott terminó segunda (2.02), mientras, otra de las candidatas al podio, la ucraniana Mahuchikh (2.06), líder la temporada, era tercera, con 2.00. El título de Lasitkene (ROC), es el tercero para una saltadora rusa, antes lo conquistaron, Yelena Yelesina (Sydney 2000) y Yelena Slesarenko (Atenas 2004).

En el lanzamiento de la jabalina, al favorito alemán Johannes Vetter (96.29) no se le vio bien desde la ronda clasificatoria (85.54) y en la final inició con 82.52, pero luego de dos envío nulo, abandonó la competencia por lesión. Antes, el cuarto en sucesión en el listado del año, el indio Neeraj Chopra (88.07) se había adueñado del liderato, con un envío inicial de 87.03, reafirmándose con 87.58 en la segunda ronda, los que le bastaron para conquistar el primer título para la India en toda la historia del atletismo olímpico. Los puestos dos y tres en el podio fueron para los checos Jakub Vadlejch (8) y Vitezslav Vesely (7); Vladejch, octavo en Río 2016, consolidó la medalla de plata en la quinta ronda, con 86.67; mietras que, Vesely, tercero en Londres y séptimo en Río, había remontado con 85.44, desde la tercera ronda.

En los 1500 metros, el noruego Jakob Ingebrigtsen (3:29.25) se mantuvo durante toda la carrera a la sombra del kenyano Timothy Cheruiyot (3:28.28), esperando el momento ideal para lanzar el remate final, que aconteció faltando unos 200 metros, Ingebrigtsen terminó con 3:28.32, nuevo récord olímpico, Cheruiyot resistió el ataque del británico Josh Kerr, terminando segundo con 3:29.01, mientras Kerr, era tercero con 3:29.05. El título de Ingebrigtsen, el primero para Noruega en esta prueba, cuyo mejor resultado, era el quinto lugar de su hermano Henrik en Londres 2012.

En el 4×400, Estados Unidos con una cuarteta de lujo, integrada por campeonas y medallistas olímpicas en Tokio 2020, Sydney McLaughlin (oro en 400c/v), Allyson Felix (plata en 400m), Dalilah Muhammad (plata en 400c/v) y Athing Mu (oro en 800m), ganó cómodamente con 3:16.85, quinta mejor marca de todos los tiempos; el segundo lugar se ubicó Polonia (Natalia Kaczmarek, Iga Baumgart-Witan, Malgorzata Holub-Kowalik Justyna Swiety-Ersetic), con 3:20.53, récord nacional; mientras que Jamaica (Roneisha McGregor, Janieve Russell, Shericka Jackson Candice McLeod) era tercera con 3:21.24 Cuba que corrió con las cuatro atletas que lo hicieron en semifinales (Zurian Hechavarría, Rose Mary Almanza, Sahil Diago y Lisneidy Veitía, terminó octava, con 3:26.92. Es justo explicar, que debido a la lesión de Roxana Gómez durante la final de 400 metros, la posta cubana vio disminuida sus aspiraciones a optar por una mejor ubicación.

En el masculino, Estados Unidos, con Michael Cherry, Michael Norman, Bryce Deamon y Rai Benjamin, lideró la carrera desde los inicios, triunfando con 2:55.70, pero los holandeses (Liemarvin Bonevacis, Terrence Agard, Tony van Diepen y Ramsey Angela), sorprendieron al resto de las cuartetas, al terminar segundo, con 2:57.18, récord nacional; mienras que Botswana (Isaac Makwala, Baboloki Thebe, Zibane Ngozi y Bayapo Ndori), llegaron tercero, con récord africano de 2:57.27.

Así cerró el atletismo en el Estadio Olímpico Tokio 2020, que dejó tres récords mundiales, 15.67 en triple de la venezolana Yulimar Rojas; 51.45 en 400 con vallas de la estadounidense Sydney McLaughlin y 45.94 del noruego Karsten Warholm, en la misma prueba.