Tras dejar al campo sensacionalmente a Puerto Rico en la jornada de ayer, la selección cubana de béisbol categoría sub 15 aseguró estar entre los cuatro grandes del campeonato del mundo que por estos días se celebra en Hermosillo, México. Los cubanos llegaron debajo a la séptima entrada, con marcador de 4 carreras por 2. En conteo de 2 y 2, 2 outs y corredores en primera y segunda, el cuarto bate Alejandro Cruz conectó una línea junto a la raya por el jardín izquierdo empujando la tercera y colocando empate y gane en posición anotadora. Finalmente, con la casa llena, el sexto hombre en la tanda Roberto Peña en 2 strikes y 1 bola pegó hit al derecho, impulsando así las carreras que le dieron a Cuba la tercera victoria en la súper ronda.

Muchos de los jugadores cubanos con lágrimas en los ojos después de haber logrado esta épica victoria. Foto: Juventud Rebelde.

Las lágrimas de Peña al llegar a primera demuestran el nivel de entrega de estos muchachos, convertidos en unos verdaderos guerreros que, conducidos por Alexander Urquiola, han demostrado que esta isla sigue teniendo nivel de élite en el deporte de las bolas y los strikes, el cual constituye un símbolo para todos los cubanos. Maylon Batista de relevo se agenció la victoria.

Box Score. Foto: Boris Luis Cabrera

Ahora Cuba lidera la lid final del campeonato del mundo siendo el único invicto, pues en el partido del cierre Taipéi de China derrotó a Japón para provocar un triple empate en la tabla de posiciones. Los nuestros rivalizarán ante los nipones hoy a las 10:30PM hora de Cuba, de ganar estarían asegurando uno de los dos cupos a la final del domingo, aún con un partido pendiente ante Estados Unidos, que tendrá lugar el sábado.

Cuba es el único invicto en súper ronda. Foto: WBSC

Toda Cuba está expectante con este equipo, pues hace rato no teníamos unos resultados tan prometedores en ninguna categoría, estos muchachos son el futuro del béisbol cubano, jueguen donde jueguen. Gracias a ellos por hacer vibrar a un país que estaba herido en materia beisbolera, pero que se ha levantado viéndolos jugar un béisbol muy armónico y entregado.