habana-panamericanosLa fiesta deportiva continental llegó por fin a Cuba en el verano de 1991, La Habana fue la sede principal del magno evento, teniendo como subsede a Santiago de Cuba. La Mayor de las Antillas había celebrado en dos ocasiones los Juegos Centroamericanos y del Caribe, la primera en 1930 y la segunda en 1982, por lo que enfrentaba el mayor reto como sede de un gran evento.
Cuba se venía preparando desde su elección para celebrar unos Juegos Panamericanos que pasaran a la historia, como los mejores. Se acometieron las construcciones de las obras, con la participación popular, las que fueron terminadas en tiempo.
La cita deportiva se celebró entre el 2 y el 18 de agosto de 1991, contó con la asistencia de récord de 4519 atletas, procedentes de 39 países, los que intervinieron en 31 disciplinas deportivas. La ceremonia de inauguración se realizó el 2 de agosto en el Estadio Panamericano, con la presencia del Comandante en Jefe, Fidel Castro, de Juan Antonio Samaranch, presidente del Comité Olímpico Internacional y Mario Vázquez Raña, presidente de la ODEPA. La antorcha desde su arribo a Cuba, recorrió toda la isla para arribar a la sede principal el 2 de agosto, el pebetero fue encendido por Javier Sotomayor, en ese momento recordista mundial de salto de altura.

Estados Unidos baja el perfil y Cuba gana el atletismo

La justa atlética se celebró en el Estadio Panamericano en la Habana del Este y aparte de las estrellas cubanas del momento, presentes todas, el evento reveló a futuras luminarias del campo y pista mundial. Aquí estuvieron los consagrados, Robson Caetano da Silva, Andre Cason, Ian Morris, Arturo Barrios, Troy Kemp, Hollis Conway, Pat Manson, Earl Bell, entre los hombres, mientras que, Letitia Vriesde, Jearl Miles-Clark y Connie Price-Smith, lo hacían entre las mujeres.
Entre los que iniciaron su camino al estrellato se citan, el canadiense Donovan Bailey, los estadounidenses, Jonathan Drummond, Quincy Watts, Cottrell J. Hunter, Anthony Washington, los mexicanos Carlos Mercenario y Miguel Ángel Rodríguez, en tanto en el femenino, estaban, las jamaicanas Deon Hemmings, Beverley McDonald, Dahlia Duhaney y Sandie Richards; la colombiana Ximena Restrepo y las estadounidenses Tonja Buford y Natasha Kaiser-Brown.
En la parte competitiva, se mejoraron siete nuevas marcas para los Juegos, dos a nombre de Ana Fidelia Quirot, en 400 y 800 metros, con 49.61 segundos y 1:58.71 minutos respectivamente.
El carioca Robson Caetano, se colgó al cuello los títulos de 100 y 200 metros (10.32-20.15); el cubano Roberto Hernández ganó los 400 metros (44.52) por delante de Morris, Reynolds y Watts; el mexicano Arturo Barrios se impuso en 5 mil metros, con 13:35.83 minutos; el brasileño Adauto Domínguez repitió el título en 3000 con obstáculos y el estadounidense Cletus Clark se desquitaba de Indianápolis, al ganar en 110 con vallas (13.71).
Javier Sotomayor fue profeta en su tierra, con 2.35 (RJ), dejó a tras a una legión de saltadores, con Kemp, Conway, Marino Drake, Leo Williams y Clarence Saunders a la cabeza; mientras que Jaime Jefferson (8.26) y Yoelbi Quesada (17.06) completaban la cosecha criolla, con triunfos en longitud y triple.
En el disco, se impuso el estadounidense Anthony Washington, futuro titular mundial en Sevilla’99, al cubano Roberto Moya, bronce olímpico al siguiente año; mientras que en la jabalina, el triunfo fue para el cubano Ramón González, con récord de 79.12 metros.
El colombiano Héctor Moreno, conquistó el título en 20 kilómetros y el mexicano Carlos Mercenario lo hacía en 50 kilómetros; los relevos, ambos fueron para las postas cubanas, el corto dejando atrás a Canadá y el largo a Estados Unidos.
La cubana, Liliana Allen se impuso en 100 y 200 metros, pero la gran dama de los Juegos, fue su compatriota Ana Fidelia Quirot, quien conquistó tres preseas de oro, 400, 800 metros y relevo 4×400. La mexicana Maricarmen Díaz, se impuso en 3000 y 10000 metros, su paisana Olga Ávalos, lo hacía en la prueba de maratón.
Las representantes cubanas dominaron en todos los eventos de campo, salvo en la longitud, donde triunfó la jamaicana, Dianne Guthrie; con Ioamnet Quinteros en la altura, Belsy Laza en la bala, Bárbara Hechavarría en el disco y Dulce Margarita García en la jabalina, con récord para los juegos de 64.78 metros.
El conteo de las medallas, arrojó lo que todos esperaban, el triunfo de Cuba, con 18 títulos, 12 de plata y 12 de bronce, Estados Unidos, perdía por vez primera el atletismo en una cita continental (9-15-16), tercero fue México (6-4-2).