Por Noel David Suárez y Pedro Jesús Águila Nava
Son muchos los entrenadores que forman generaciones de peloteros para su provincia, el país y un poco más allá, varios de ellos lo hacen desde el anonimato, pero no por eso dejan de ponerle empeño y dedicación para emplear su tiempo a enseñar. Uno de los tantos casos de educadores consagrados al béisbol es el del avileño Michel Pino Feo, quien desde su retiro del deporte activo en 2007 ha fungido como guía de jóvenes categorías, sobre todo en su municipio Morón, donde actualmente es el mánager del equipo de las Pequeñas Ligas. Michel es un enamorado eterno del béisbol, es de esas figuras necesarias en nuestro Deporte Nacional, las que demuestran que a pesar de tantos pesares aún quedan entrenadores que luchan por que sus discípulos sean mejores cada día, al igual que el capitalino Ebris Pablo Martínez, anteriormente entrevistado.
Con Michel Pino Feo conversamos en la banda del RF del estadio José Ramón Cepero de Ciego de Ávila, en el transcurso de la última jornada de la etapa clasificatoria de la 45 Serie Provincial de Béisbol, en la que forma parte del cuerpo de dirección de los Gallos Rojos de Morón al frente del picheo, equipo que logró incluirse en la Gran Final del campeonato.
A continuación, les presentamos sus declaraciones, otro acercamiento necesario a un hombre de béisbol.
Michel bienvenido a Deporcuba, un placer inmenso tenerte por acá. Hablemos un poco sobre tu trabajo actualmente como entrenador.
Gracias a ustedes por invitarme. En estos momentos me encuentro trabajando con el equipo de primera categoría, soy el entrenador de picheo de Morón en la Serie Provincial, además estoy al frente del equipo en las Pequeñas Ligas, en la categoría 11-12.
Comienzas como entrenador en el año 2007 al frente de la categoría 9-10. Coméntanos acerca de ese debut.
Una vez retirado del béisbol me incorporo a entrenar la categoría 9-10 en Morón. En ese 2007 clasificamos en la zona norte, fuimos a la final en 1ero de Enero y terminamos en el tercer lugar, perdimos con Ciego en el cruce y le ganamos a Ciro Redondo en la discusión del bronce. Luego de ese resultado paso a cumplir misión en Venezuela durante dos años y siete meses, trabajé en el estado Bolívar, en la ciudad de Puerto Ordaz, primero en la Ferro-Minera Orinoco y después me incorporo a una escuela de béisbol llamada Eventuari, ahí trabajé con la categoría 13-14 años y la juvenil.
Tuviste excelentes resultados en el sub 15 a nivel nacional al frente de Ciego de Ávila, ¿qué tan importante fue esa etapa para tí?
Exacto,en el 2014 ganamos el Campeonato Nacional sub 15, era la primera vez que Ciego de Ávila quedaba campeón en esta categoría. Gracias a ese título trabajé ese año en la preselección del equipo Cuba. En 2015 volvimos a ganar, pero no me convocaron al Equipo Nacional, teniendo el mejor picheo de Cuba y al lanzador más valioso del torneo. En 2016 repetimos con los dos mejores lanzadores del campeonato en nuestro equipo, Osiel Rodríguez y Frank Nicovo, en esaocasión le ganamos a La Habana en el partido final celebrado en Granma. Ese año sí me mandaron a buscar para ser el entrenador de picheo del Cuba sub 15 para el Panamericano 15-16 y el Campeonato Mundial, estuvimos un mes aquí en Ciego de Ávila preparándonos.
Ese 2016 fue clave para tí como entrenador, pues finalizaste por todo lo alto el año con el título en el Campeonato Mundial sub 15 de Japón junto a tus muchachos, además de la participación en el Panamericano 15-16 de Panamá, que ya los mencionabas. Cuéntanos sobre lo ocurrido en ambos eventos y cómo viviste la corona en el mundial.
Sí, fuimos a ese Panamericano 15-16 con el objetivo de foguearnos, había jugadores de otros equipos que eran mayores que los nuestros, que todos eran menores de 15 años. Quedamos en el segundo lugar, perdimos ante Panamá, no era como tal un torneo oficial porque los propios panameños tenían dos equipos. Luego de ese evento regresamos a La Habana para seguir preparándonos de cara al mundial sub 15, donde quedamos campeones.
Fue un Campeonato Mundial bien fuerte, quedamos ubicados en un grupo junto al local Japón, Korea del Sur, Australia, Colombia y República Checa, ahí clasificaban los tres primeros. Nosotros pasamos segundos perdiendo un solo juego ante Japón, que quedó primero en un grupo en el que Colombia pasó de tercero. En la súper ronda abrimos enfrentando a Estados Unidos, partido que ganó el lanzador avileño Osiel Rodríguez, los norteamericanos venían invictos, pero los nuestros batearon a la hora buena y fueron mejores, sobre todo nuestro inicialista Loidel Chapellí, quien fue el MVP del certamen, le ganamos 11 a 2. Al día siguiente le ganamos a Panamá 5 por 2, juego que lanzó el moronero Frank Nicovo, y en el tercer juego derrotamos a Venezuela 4 a 1 con un gran trabajo de Edgar Martínez, un pícher de Ciudad de La Habana. Fuimos a la final contra Japón, un partido muy difícil, tenían a un zurdo que nos había dado lechada en la etapa clasificatoria, no había permitido carreras en todo el campeonato, pero le hicimos tres en el segundo inning y lo explotamos. Nuestro abridor Liván Chaviano los aguantó y pudimos vencer en ese partido 9 a 4, además de un excelente relevo de Osdany Rodríguez, un pícher de Villa Clara que en estos momentos se encuentra jugando en la Liga Élite con Artemisa.
Regresas a las Series Nacionales en su edición 61, pero ya como entrenador de picheo. ¿Cómo fue ese proceso de regresar a los Tigres y quién te hace este llamado?
En la Serie 61 Juan de Dios Peña, que estaba al frente de los lanzadores, va a cumplir misión a Panamá y el otro entrenador, Andrés García, me convoca, habla con la Comisión y me aprueban para estar con el equipo de los Tigres, trabajé como entrenador de bull pen en esa Serie, estuve hasta la mitad del campeonato porque me llega una misión a Italia y estoy seis meses trabajando con el softbol femenino de niñas. Al regresar me incorporé a la primera categoría y me vuelven a llamar para la Serie 62, donde logramos clasificar a los play off.
En los últimos años el picheo ha sido el punto débil para los equipos avileños en la Serie Nacional. ¿A qué crees que se deba esto?
Tenemos un picheo muy joven, con muchachos que vienen emergiendo de los juveniles, pero desgraciadamente muchos han tomado otro camino, teníamos a un zurdo que venía muy bien en la categoría juvenil como Yadier Batista, además de tres atletas que estaban en la preselección del equipo Cuba sub 18, el caso de Liranza, de Téllez y Jonathan López, que venían en ascenso, pero bueno, habrá que seguir trabajando en aras de seguir formando atletas de calidad para el béisbol avileño.
Regresamos al presente para conocer un poco sobre el equipo que diriges en las Pequeñas Ligas, ¿qué pretensiones tienes al frente de estos niños?
El equipo está bien, hemos hecho una buena preparación, empezamos en el mes de septiembre, tenemos a cinco muchachos que están en la Academia de Morón, mientras que con los de la calle conformamos una preselección con la que íbamos haciendo cortes poco a poco hasta formar el equipo con sus 14 peloteros. Esta categoría es un poco complicada porque juegan los 14, el picheo es de 46 pies, hay niños de 6to grado que cumplen años antes de diciembre que pueden jugarla. Nosotros estábamos sembrados junto a Ciego de Ávila y nos tocó Boliva en las semifinales, un rival bien fuerte que venía de ganarle a 1ero de Enero 1 por 0 y a Chamas 5 a 2. El equipo nuestro se portó muy bien ante ellos en el cruce y le ganamos 6 a 1 el primer partido apoyados en un lanzador muy bueno que tenemos, su nombre es Erislandi, el segundo se abrió desde el inicio y lo ganamos sin problemas con marcador de 16 por 4, la victoria fue para Edgar, un pícher nuestro que está en la Academia.
Esta semana debe ser la final, los juegos serán en el Paquito Espinosa, el Comisionado de la provincia Jesús Echarte nos informó que el calendario dependerá de la final provincial en la que estará Morón, para que no choquen. Nunca hemos ganado en Pequeñas Ligas, Ciego ha sido el campeón de las dos ediciones anteriores, veremos qué sucede en esta.
Llegó el momento de remontarnos a tu etapa como lanzador de los Tigres de Ciego de Ávila. ¿Cuál ha sido el momento más feliz de Michel Pino dentro de un terreno de béisbol?
En la Serie 44 en un juego ante Industriales en el Latino, me tocó lanzar ante el zurdo Arley Sánchez, integrante de varios equipos Cuba, fue un juego que estuvo 0 a 0 hasta el octavo inning, en el que hicimos cuatro carreras por hit de Yoelvis Fiss que impulsó a Dany Miranda, y después vino un jonrón de Lisdey Díaz con dos en base que puso el juego 4 a 0. Yo estaba dando no hit no run hasta el octavo, cuando con dos outs Yoandry Urgellés me dio tubey para el LF. En el noveno también con dos outs el receptor Galarraga me da hit al medio, y esas fueron las dos carreras que me hicieron. Industriales ese año discutió el Campeonato con Santiago, tenía peloteros de la talla de Enriquito Díaz, Tabares, Yoandry Urgellés, Scull, Malleta, Rudy Reyes, lanzadores como Yadel Martí, Deinis Suárez, Frank Montieth, un gran equipo.
Ese fue mi mejor año, gané 8 y perdí 4, estuve en los play off y perdimos con Villa Clara, que era el verdugo nuestro por aquellos tiempos. Después me llaman para jugar la Súper Liga, Lourdes Gurriel, que era el director de Centrales me manda a buscar y trabajé de abridor, recuerdo que abrí un partido en Güines contra el equipo Habana y le gané 11 a 1 a Yulieski González.
Te tocó lanzar en una época de grandes bateadores. ¿Cuál o cuáles eran los que te resultaban más difíciles?
Yo era más bien un pícher lateral a tres cuartos, por mi forma de lanzar los bateadores zurdos se me hacían muy difíciles, el caso de Ariel Borrero de Villa Clara y Antonio Scull me conectaban muy bien. Sin descuidar a los demás, por ejemplo, Danel Castro siempre me conectó muy bien, y aún se lo sigue haciendo a las nuevas generaciones de lanzadores a sus 46 años.
Ídolos de Michel Pino Feo
Yo simpatizaba mucho con el pinareño Rogelio García y con el industrialista Lázaro Valle, siempre me llamaron la atención.
Cerramos con tu opinión sobre los Tigres Avileños de cara a la Serie 63, según tu sapiencia y experiencia, ¿qué se puede esperar del equipo?
Ya para esta Serie hay cambios en la dirección, pero hay muchachos jóvenes que se ven con perspectivas, además todavía quedan jugadores veteranos de calidad como Osvaldo Vázquez y Raúl González. Como te decía antes, hay juventud en el picheo, lanzadores que si se lo proponen pueden ayudar al equipo, el caso de Leonardo Reyes, que ya estuvo en un Equipo Cuba sub 15, los muchachos de Morón que han estado muy bien en el Provincial como Yoan Carlos Díaz, que ha dado un cambio radical, tiene seis ganados, está entre los primeros en carreras limpias, pero lo que más me impresiona es que se ha visto con potencia en todas las salidas, aún tiene que trabajar en el pensamiento técnico táctico, pero viene muy bien. Tenemos a Dairon Morell, que ha tenido muy buenos resultados a nivel provincial, pero nunca ha sido llamado a una preselección de Ciego de Ávila, ya estuvo en un sub 23 en el que ganó dos juegos y creo que debería recibir más oportunidades, el caso de Luis Miguel Portales, que a pesar de sus 32 años lo ha hecho muy bien, no sé qué tendrá pensado la Comisión con respecto a los lanzadores mayores de 30 años, porque en Santiago se dio un caso de un novato con 31 años que ha estado excelente, Osvaldo Acuña, por eso a veces no podemos encapricharnos en muchachos de 17 y 18, si hay uno de 30 que tiene las condiciones y puede resolver durante dos o tres temporadas deberían traerlo, hay que ver que decide la Comisión Provincial este año.
Muchas gracias.
Reiteramos el agradecimiento a Michel por acceder a conversar con nosotros y desde nuestra casa de Deporcuba le deseamos muchos éxitos en las finales del Campeonato Provincial y las Pequeñas Ligas.
Deporcuba. Entrevista.
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