leonel Por  José Antonio Chapman/JIT

Con el estelar decatlonista holguinero Leonel Suárez Fajardo siempre es agradable conversar. Por eso al conocer de su estancia en la tierra que le vio nacer JIT decidió ir a su encuentro.

El doble medallista de bronce olímpico aceptó el diálogo optimista, con la elocuencia y sabiduría que engrandecen su admirable sencillez.

Noviembre de 2013 y enero de 2014 han llenado de alegría y motivaciones tu vida ¿Puedes argumentar esta afirmación?

Con mucho placer. El 16 de noviembre del 2013 nació mi hija y en los primeros días de este 2014 las direcciones del Partido y el Gobierno en la provincia de Holguín me asignaron una confortable vivienda que me hace muy feliz por lo que representa desde el punto de vista personal y saber que es una preocupación menos.

Puedo asegurarte que aunque la vivienda se me entregó, según me explicaron, por mi destacada trayectoria deportiva nacional e internacional, la recibí como un estímulo, un gran compromiso.

Te confirmo que no voy a defraudar a todos los que confiaron y confían en mí. Ese es el mayor compromiso que encierra este reconocimiento, que mucho ayuda a entregarme plenamente a los entrenamientos, aunque ahora estoy lesionado.

¿En que consiste?

La lesión comenzó en los Juegos Olímpicos de Londres´12, cuando al concluir el salto de altura tuve una pequeña molestia en la rodilla derecha, que se agravó en el Campeonato Mundial de 2013.

Los médicos especialistas diagnosticaron que padezco de una insersionitis en la rótula, culpable de la aguda molestia que me impide entrenar con el rigor adecuado.

¿Cuál será el tratamiento?

Cuando llegué a La Habana, en el hospital ortopédico Frank País determinarán si es a base de células madres o si es necesaria una intervención quirúrgica mediante el método de artroscopia, que busca la regeneración del tejido dañado.

Pero estoy preparado para la decisión que se tome, porque la molestia es insoportable y para mí lo más importante es lograr plena recuperación lo más rápido posible.

¿Entonces estás de reposo?

Nada de eso. Corro y fortalezco el llamado tren superior del cuerpo, lo que no puedo es saltar ni realizar carreras intensas, de ahí que no pueda asegurar que estoy entrenando a plenitud, realidad que imposibilita pensar en competencias de inmediato.

¿Podrás hacerlo este 2014?

Todo está en dependencia de cómo se evalúe la lesión en cuanto al grado de gravedad, y lógicamente de la respuesta al tratamiento. No obstante deseo estar recuperado para los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz, México, en noviembre.

Mi optimismo es grande, claro, con los pies en la tierra, y ahora ante la lógica incertidumbre es difícil responder de manera totalmente positiva la respuesta.

¿Aspiración?

Regresar al podio en eventos mundiales, que es lo mismo que decir mantenerme entre los tres primeros del orbe, propósito en el que no cederé ni un ápice en mi empeño.

Contagia el optimismo de Leonel Suárez Fajardo, un joven que no da espacio al pesimismo, apegado a la añeja certeza de que el que persevera triunfa.