El lanzamiento del disco entre las damas es una de las disciplinas que mayor rivalidad exhibe hoy día. La experiencia de ser cubanos y de haber seguido el rendimiento de Yarelis Barrios nos deja experiencia suficiente para corroborarlo. Quizás en ello, y hasta en la subjetiva “falta de suerte” de la pinareña descansa la explicación del por qué, aun cuando se ha dedicado a lanzar lo mejor de su vida en los eventos fundamentales, en su palmarés no coexiste el oro mundial y/o olímpico. En el último año, la joven croata Sandra Perkovic fue noticia en la complicada especialidad ya que dominó a placer durante toda la temporada. Lo ganó todo: el campeonato Europeo en Helsinski, la Liga del Diamante donde sumó 30 puntos como resultado de seis primeros lugares y un segundo (en Paris) y los Juegos Olímpicos.
Precisamente en Londres, sede de la última contienda olímpica, la fornida tiradora se convirtió en la primera campeona olímpica de su Croacia natal, y arrasó con las ilusiones del resto de las discóbolas al ofrecer un ensordecedor monólogo una final en la que lanzó lo mejor de su carrera (69,11) y terminó con 1.5m de ventaja sobre su más cercana perseguidora; la rusa Daria Pischalnikova a la postre descalificada por detección de sustancias prohibidas en su organismo. Sobre cómo recuerda ese momento y de sus expectativas de cara al 2013 conversó con DeporCuba:
¿Qué siente al saberse dueña del primer título olímpico en la historia de su país?
Estoy muy feliz y orgullosa de lo que he hecho. Ser la primera medallista de oro en los Juegos Olímpicos de verano para mi país es mi mayor resultado como atleta. Mi sueño se hizo realidad cuando me subí a la cima del podio, mientras escuchaba las notas del Himno Nacional y mirando la bandera ondear.
Las palabras no pueden describir lo que sentí, tanto cuando gané como mientras se desarrollaba la competición. Mi familia y mis amigos estaban en el estadio, conmigo. Y es muy grande el hecho de saber que ellos, que son las personas más importantes en mi vida, pudieron acompañarme mientras hacíamos historia.
El 2012 la proyectó como una “chica invencible”, ¿cómo enfrentó el saberse favorita ante cada competición?
No había presiones adicionales. Yo estuve preparando la temporada de 2012 durante mucho tiempo, me esforcé muchísimo. Los Juegos Olímpicos y el campeonato Europeo son solo un pequeño período de tiempo en el que se necesita una fuerza mental para acompañar la consecución de las metas. Afortunadamente todo salió como lo habíamos planificado. Estaba lista para disfrutar de los frutos de mi trabajo, adoro lanzar y soy una buena competidora. Disfruto las victorias pero estoy lista para manejar las derrotas también.
¿2013?
El Campeonato Mundial será en Moscú y tengo especial interés en él porque la medalla mundial es la que falta en mi colección personal. Estoy deseando que todo marche bien y según lo planificado para tener un buen resultado allí. Claro, también estoy preparando para la Liga del Diamante.
En cuanto a las marcas, la meta es sobrepasar la mágica barrera de los 70 metros y unirme al pequeño grupo de mujeres que han conseguido ese resultado en su carrera deportiva. Sin embargo, ahora mismo no pienso en las distancias, estoy enfocada en mi práctica y en trabajar todo lo fuerte que pueda para avanzar hacia mis objetivos.
¿Gusta de la Liga del Diamante?
Realmente amo esa competición. Me anima a lanzar fuerte y buscar superar los límites. Me gusta viajar, conocer nuevas personas y este evento propicia esto. Adicionalmente los estadios son maravillosos y siempre están repletos de niños y jóvenes. Lo cual me da mucha fuerza y deseos para seguir esforzándome a diario.
¿Qué opinión le merecen los atletas cubanos?
Los atletas cubanos son exitosos, con disimiles resultados a niveles internacionales. Su calidad me toca de cerca ya que una de mis mayores rivales es la cubana Yarelis Barrios.
¿Tiene ídolos en el deporte o en la vida?, quizás alguien que le inspire a ser mejor y superarse cada día.
No tengo ídolos, pero admiro a Muhammad Ali. Considero que su vida y sus hazañas constituyen una inspiración para muchos deportistas.
Antes de cada disparo, quizás antes de cada competición, ¿tiene algún ritual?
No, no tengo ningún rito especial, solo me centro en mi preparación mental porque es lo más importante a la hora de lanzar, hay que estar calmados y centrados.
¿Qué piensa de los análisis retroactivos y de la serie de acciones que está llevando a cabo la IAAF para luchar contra las situaciones de dopaje?
Apruebo estas medidas, pienso que todo el mucho tiene el derecho de tener lo que les pertenece.
Imagine que puede dirigirse a un grupo de jóvenes, ¿cuál sería su consejo para enfrentar la vida?
Sin importar cual sea el camino que decidan seguir, la clave en la vida es ser persistentes y valientes para avanzar hasta las metas. No se le puede temer a los obstáculos, hay que tomar riesgos y luchar cada día por las metas. Esas son las claves del éxito en la vida.
El récord del mundo de 76.80m en poder de la alemana Gabriele Reinsch desde 1988, ¿cómo ve la marca hoy día?¿es uno de esos registros que llamamos “imposibles”?
Es una gran marca, nadie se le ha acercado en mucho tiempo pero, quién sabe que nos depara el futuro
Interesante tu artículo. «La mala suerte» de Yarelis radica en que en esa disciplina siempre hay alguien que con métodos legales o ilegales aquí no viene al caso ha sabido concentrarse en una competencia determinada.
A mi juicio Yarelis dejó pasar su mejor oportunidad en Peking, cuando la atleta norteamericana la superó con un lanzamiento que Yarelis en aquel entonces estaba en condiciones de superar, aunque hay que señalar también que por las marcas precompetencias, la americana estaba en una mejor posición que la cubana. Ha sido lo único que Stephanie ha ganado, pero por ser el oro olímpico, tiene un valor imcomparable.
Hay una lista bastante larga atletas norteamericanos que se concentran para ganar en las competencias de importancia. ¿De cómo lo logran? esa es la pregunta del millón.
Yo creo que no siempre con métodos muy legales.
Por otro lado hay atletas que son muy constantes, un ejemplo es Yarelis, que desde el 2007 obtuvo medalla en toda competencia a la que se presentó. Eso tiene su gran valor histórico, Ella no es una estrella fugaz, sino que es una estrella que brilla por mucho tiempo en el firmamento deportivo.
El punto débil de Yarelis me parece su técnica. En ocasiones he temido que se caiga haciendo algún lanzamiento y que este fuera anulado por salirse del círculo, pero su fuerza física le ha hecho posible salvarlo. Supongo que la ansiedad le ha impedido muchas veces concentrarse debidamenten en la técnica.
En general creo que durante la Olimpiada del año 2008 los únicos atletas cubanos que fueron centrados fueron Robles, Yipsi, Camejo y Girat aunque solo quedó cuarto, pero con mejor marca personal.
He leído muchas veces que las Olimpiadas son algo especial por la conglomeración de muchísimas disciplinas deportivas, que al final es como una gran fiesta para los atletas. Quizás muchos deportistas cubanos se hayan dejado llevar por esa impresión y hayan olvidado a qué fueron a la Olimpiada.
Me imagino que los atletas cubanos deberían trabajar más y/o mejor sicológicamente, para ser sensiblizados y tengan presente la gran verdad, de que muchos atletas solo reciben una gran oportunidad en toda su vida deportiva, que deberían aprovechar, porque no saben si se les va a presentar otra más.