Por Eddy Luis Nápoles Cardoso
Ha concluido el Campeonato Mundial de Atletismo en Londres y se impone realizar una valoración sobre la actuación cubana en este evento. Para ello, tendré en cuenta diferentes aristas del comportamiento de los cubanos que contendieron en Londres: logro de medallas, ubicación de atletas entre los ocho primeros (finalistas) y desempeño individual, respecto a la mejor marca previa al evento.
Desde el punto de vista de las medallas conseguidas, la presea de bronce de Yarisley Silva fue la única lograda por Cuba y ello representa la demostración más pobre del atletismo criollo en estas citas, pues en Roma 1987, se conquistaron dos preseas de ese propio color (Luis Mariano Delís, disco y el relevo 4×400 masculino). Antes, en Helsinki 1983, se había conseguido una, de plata (Luis Mariano Delís, disco).
Respecto a las ubicaciones de atletas entre los ocho primeros, se lograron nueve cupos de finalistas y 35 puntos, siendo este un aspecto positivo ya que supera las labores realizadas en Moscú 2013 (siete finalistas y 32 puntos) y Beijing 2015 (cinco finalistas con 30 puntos).
La representación cubana a esta cita mundial estuvo integrada por 27 atletas, los que intervinieron en 20 pruebas individuales y dos relevos, sumando 22 posibilidades competitivas. Pero apenas lograron cuatro mejores marcas del año para un 18.18% de efectividad, mientras que promediaron 67 días de antelación, con relación al logro del mejor resultado anual en la competencia fundamental.
En el aspecto individual destaca la actuación de la heptatlonista Yorgelis Rodríguez, con una de las cuatro mejores marcas realizadas, quien implantó nuevo récord nacional con 6594 puntos para ubicarse en un excelente cuarto lugar. Yorelis superó por 113 unidades lo realizado en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro el pasado año (6481) y por 148, los 6446 que había logrado el 28 de mayo de este año en Götzis.
El relevo 4×400, también consiguió su mejor desempeño anual en este evento, gracias al excelente tramo final de Yoandys Lescay, para cronometrar 3:01.10 minutos, mejorando en 88 centésimas lo realizado en la semifinal y en 2.74 segundos, la marca previa (3:03.84) lograda el 23 de abril en Nassau, Bahamas.
Otro de los desempeños positivos fue realizado por la posta 4×100, con 39.01 segundos, un relevo acoplado en Londres, que mejoró 66 centésimas en relación a lo hecho en Nassau (39.67), el 24 de abril.
La cuarta mejor marca lograda estuvo a cargo de la maratonista Dailín Belmonte (2:46:15), pero con la particularidad de que fue este su primer maratón de la temporada.
Es preciso aclarar que la corredora de 400 metros Roxana Gómez, tenía marcada su competencia fundamental en el Campeonato Panamericano Juvenil, celebrado en Trujillo, Perú, cita donde Roxana tuvo su mejor rendimiento con 51.46 segundos, el 21 de julio. Ahora marcó 51.98, segunda mejor marca, lo cual se ha de ver como una actuación positiva, teniendo en cuenta la juventud de esta atleta y el nivel de la competencia.
Ahora veamos en detalles el resto de los contendientes, donde llama la atención el triplista Lázaro Martínez, atleta que arrastra su mejor resultado personal (17.24) del 21 de febrero de 2014, cuando aún era cadete y que no ha podido mejorar en más de tres años de entrenamiento. Lázaro se presentó en Londres con marca previa de 17.07 metros, lograda el 11 de febrero en La Habana, pero 177 días más tarde, el 7 de agosto, durante la ronda clasificatoria saltó 16.66, decreciendo en 41 centímetros y tres días más tarde, en la final, 16.25, con 82 centímetros menos.
Los otros tres triplistas, dos hombres y una mujer, también quedaron por debajo de la marca previa; Cristian Nápoles, el de mejor desempeño en Londres (cuarto lugar), había logrado un salto de 17.27, el 17 de marzo en La Habana, pero transcurridas 146 jornadas, el 10 de agosto, decreció en 11 centímetros (17.16); por su parte Andy Díaz, presentaba marca de 17.40, salto logrado en igual fecha y lugar que Cristian, decreciendo en 27 centímetros, con 17.13, en la final mundialista; mientras que Liadagmis Povea tenía un salto previo de 14.45, del 26 de mayo en La Habana, pero pasados 71 días, solo saltó 13.55, descendiendo 90 centímetros.
También mostraron significativos decrecimientos tres de las principales atletas cubanas actuales, la pertiguista Yarisley Silva y las discóbolas, Denia Caballero y Yaimé Pérez; Yarisley se presentó en Londres con salto precedente de 4.81 (Oslo, 15 de junio), decreciendo 16 centímetros (4.65), 52 días más tarde; mientras que Denia había lanzado 14 jornadas antes, 67.04 en Leiria, el 30 de julio, marca que vio descender en 2.67 metros, el 13 de agosto; en tanto Yaimé llegó a la cita mundial con 69.19 metros, envío realizado 37 días antes en Sotteville-lés-Rouen, decreciendo en 4.37 metros (64.82).
El saltador de longitud Juan Miguel Echevarría, tampoco mostró sus mejores rendimientos en este evento, pues traía un salto previo de 8.28, logrado el 14 de julio en Madrid y saltó apenas 7.86, el 4 de agosto, en la ronda clasificatoria; como tampoco mejoró el jovencito Maykel Massó (8.33, el 14 de julio en Madrid y 8.26, el 5 de agosto en Londres), aunque es justo reconocer que firmó una excelente competencia.
En los 400 metros Yoandys Lescay, con una marca precedente de 45.18 (Madrid, 14 de julio) y 45.93, el 5 de agosto, también decreció (en 75 centésimas). Son llamativo en Lescay, las ondulaciones en sus rendimientos en este año, con 45.65 en La Habana, el 15 de marzo; 45.9, en La Habana, el 26 de mayo; 46.37 en Bilbao, el 24 de junio; 46.01 en Barcelona, el 1° de julio;45.18 en Madrid, el 14 de julio y 45.93 en Londres, el 5 de agosto. A esto habría que añadir, el resultado logrado en los pasados Juegos Olímpicos, 45.00, marca, que en el peor de los casos, debió ser igualada, de concretarse un ciclo normal de entrenamiento.
Rose Mary Almanza (800 metros), ahora realizó una mejor demostración, pero como había sucedido en Moscú 2013 y Beijing 2015, quedó nuevamente en semifinales, en esta ocasión se presentó con previa de 1:59.11, lograda el 14 de julio en Madrid, perdiendo 68 centésimas (1:59.79), el 11 de agosto.
Yaniuvis Lopez (bala), fue otra que mostró mejorías respectos a citas mundiales anteriores (Berlín 2009, Moscú 2013 y Beijing 2015), logrando una plaza de finalista, octava con 18.03, pero igualmente, decreció en 89 centímetros respecto a su registro previo, 18.92, del 30 de junio en La Habana.
Los vallistas cortos, Yordan O’Farrill y Roger Valentín Iribarne, también estuvieron por debajo de sus resultados precedentes; O’Farrill, con un 13.33 logrado el 14 de marzo en La Habana, tuvo un incremento de 23 centésimas, el 6 de agosto, (145 días); mientras que Iribarne, se acercó más a su mejor desempeño, 13.39, el 26 de mayo y 13.43, el 6 de agosto.
Cierran los vallistas largos José Luis Gaspar y Zurian Hecheverría; Gaspar se “paró” en la meta con la mínima de la IAAF (46.35), el 10 de junio, durante una prueba de control en La Habana y luego, al paso de 54 jornadas, marcó en Londres, 51.98, decreciendo 2.63 segundos; mientras que Zurian estuvo mejor, pues con un 56.02 precedente, logrado el 20 de mayo, respondió con 56.44, el 7 de agosto, 79 días después, cediendo 42 centésimas.
Hipotéticamente, de haber logrado varios de los atletas aquí mencionados, los mejores resultados en el marco de la cita londinense las ubicaciones hubieran sido las siguientes; Yarisley Silva (pértiga-4.81) y Andy Díaz (triple-17.40, medallas de plata; Yaimé Pérez (disco-69.19), Maykel Massó (longitud-8.33) y Cristian Nápoles (triple-17.27), bronce; Denia Caballero (disco-67.04) y Yaniuvis López (bala-18.92), cuarto lugar y Juan Miguel Echeverría (longitud-8.28), quinto, entre otros.
Es oportuno expresar, que algunos de estos atletas, los de menos nivel, no tuvieron la oportunidad de realizar una etapa pre-competitiva fuera de Cuba, limitándose solo a las pruebas de confrontación realizadas en el vetusto Estadio Panamericano, ocasión que si disfrutaron los de mayor nivel, pero como ha demostrado la cita de Londres, no fue bien aprovechada en este aspecto.
Este fenómeno de la no realización del mejor resultado anual en la competencia fundamental se ha venido agudizando en los últimos años y lo que en otros momentos eran casos aislados, hoy son una generalidad por lo que sería recomendable para el bien del atletismo cubano investigar minuciosamente las causas que lo provocan.
Terminó con varias interrogantes, las que al ser respondidas, pudieran ofrecer las respuestas necesarias a la manifestación de este fenómeno.
1- ¿Están actualizados los entrenadores cubanos en la aplicación de las concepciones modernas del entrenamiento deportivo en correspondencia al nivel y cantidad de competencias en que participan sus atletas en un ciclo anual?
2- ¿Utilizan correctamente los entrenadores cubanos los medios, en correspondencia al momento de la preparación?
3- ¿Conocen los entrenadores cubanos los índices de crecimiento anual por edades en sus respectivas especialidades?
4- ¿Existe correspondencia entre el diseño de la ruta competitiva, la propuesta de marcas a lograr en ella, respecto a la competencia fundamental y a la mejor marca a realizar en el año?
5- ¿Están debidamente capacitados los directivos del atletismo cubano para implementar y llevar a cabo los mecanismos de control necesarios que permitan satisfacer lo planteado en las cuatro interrogantes anteriores?
En las respuestas, está la clave para tomar el camino de regreso a la élite del atletismo cubano.
Muchas gracias a Lilian y a DeporCuba por el excelente artículo. Seguramente que los casos de Roxana Gómez, Maykel Massó, Nápoles e Iribarne son muy especiales, porque a pesar de no haber logrado sus mejores marcas en Londres tampoco estuvieron a años luz de las mismas, o sea que si tenemos en cuenta, la presión de la competencia, las condiciones climáticas, y la edad de los tres mencionados pues se podría aceptar que no hayan mejorado, ya que tampoco han puesto en ridículo el sistema deportivo cubano, más que los de los saltos estuvieron cerca del podio.
En el salto de longitud, los norteamericanos con más experiencia que Massó y Echevarría no pasaron a la final, o sea que a cualquier atleta de las disciplinas de lanzamientos y saltos le puede suceder que no pase a la ronda final, no en vano le temen tantos atletas a ese concurso, y con razón porque en la historia de los campeonatos mundiales y de los JJ.OO. hubo varios casos en los que los favoritos ni pudieron competir en la ronda final, por haber fallado en la clasificación, ahora bien, nadie con deseos de avanzar en su vida se toma como ejemplo a seguir lo negativo, o sea que se debe analizar la situación de los atletas cubanos sin tomar como punto de referencia a atletas de otros países que no clasificaron a la ronda final.
El caso de Yarisley también es sumamente complicado, porque en la pértiga por pertenecer a los saltos hay muchas posibilidades de fallar, debido al viento, etc. La misma Yarisley aprovechó en otras oportunidades las debilidades de las atletas que en aquellos años mandaban en la disciplina y ahora le tocó el turno a ella de verse superada por atletas más jóvenes, mas si somos justos, aunque las medallas tienen diferentes valores, pero ganar una medalla en un mundial siempre me parece un éxito, además que ella este año marchaba en el quinto puesto y terminó tercera, o sea que desde ese punto de vista mejoró en dos posiciones.
El disco femenino cubano me parece un fenómeno por parecerme las cosas inexplicables, es que se conoce de antemano que la Perkovic es muy dificil de derrotar, pero lo mismo que le criticamos al triplista Lázaro Martínez se lo podríamos criticar a Denia Caballero, y es que ¿dónde está el desarrollo positivo de la atleta? ¿Qué cosas se han cambiado en su entrenamiento que obviamente conducen al fracaso? Ya el año pasado decepcionó porque después de un año por encima de los 70m y un campeonato mundial con una marca bastante cerca de ese esa marca, había bajado su rendimiento, y parece que aún no ha tocado el fondo, porque en Río lanzó más de 65m y ahora en Londres casi un metro menos.
Yaimé parece no ser una muchacha de competencia porque ya nos tiene acostumbrados a lanzar más en la clasificación que en la final y a tener mejores marcas durante todo el año sin acercarse a estas en el momento preciso.
En los saltos horizontales la mayoría de los atletas ganaron con peores marcas que las que llevaban de inscripción. El propio Taylor había logrado este año 18,11m y en Londres se quedó en 17,68m. Se pudiera sospechar que es un atleta como nuestro Iván Pedroso que dominaba la competencia de un modo tal, que solo saltaba lo necesario para ganar, pero Taylor que es un atleta con mucha experiencia pienso que puede darse el lujo de ahorrar fuerzas o de cuidarse para la competencia donde intentará romper la marca de Edwards, pero de los nuestros, por la edad, esperaba que compitieran como leones y no como ovejas.
Para mí el análisis a hacer sería por qué no se hacen buenas marcas en la competencias y por qué muchos atletas se estancan en sus rendimientos y con el paso de los años hacen marcas como cuando empezaron a competir internacionalmente y supongo que esa sea muchas veces una de las causas para retirarse de la preselección con las pérdidas económicas que eso conlleva, pues si se invierte en un atleta durante varios años, es de esperarse que al cabo de un tiempo normal de desarrollo empiece a rendir de acuerdo a lo planificado.
DeporCuba pregunta si los entrenadores cubanos están capacitados, en muchas ocasiones pienso que no lo están, o están realizando su trabajo totalmente desinteresados, porque en las competencias de pista la mayoría de los atletas cubanos no tiene ni estrategia válida para vencer, y muchas veces se nota que hubo una mala preparación, porque no llegan a la meta con el mismo ímpetu con el que arrancaron.
Lo mismo pienso de los dirigentes, o no son aptos para dirigir, aunque tengan medallas como atletas, eso no significa que sean buenos dirigentes, y para colmo no muestran mucho interés en la causa del deporte cubano.
Y una vez más se ha visto claramente que la meta del atletitsmo cubano (atletas, entrenadores y dirigentes) es la de salir a competir por salir y no salir a competir para ganar.
Para terminar, lo más positivo del mundial, Yorgelis, para ella faltan las palabras, es una muchacha capaz de cumplir y sobrecumplir los pronósticos, como Yarisley en sus mejores años que de cada competencia importante regresaba con una nueva marca personal y un nuevo récord cubano. Ojalá siga con ese interés y esos deseos de hacerlo siempr eun poco mejor. Pienso que por su bien, no debería competir en varias disciplinas, adicionalmente, aunque nos duela no tener a una seguidora de Quintero, pero el heptalón es una disciplina tan exigente, que a manera de fogueo se puede intentar competir en alguna disciplina individual, pero en competencias globales es mejor que la muchacha se concentre en el heptalón, quizás se podría intentar en unos Centroamericanos si las contrarias del salto alto se conocen de antemano como más débiles que la nuestra. A mi juicio mejor sería tomarla como ejemplo y desarrollar a algunas muchachas especializadas en el salto alto.
Y volviendo a Yarisley, si no es capaz de saltar como hasta hace un año o dos la va a tener muy difícil en los Centroamericanos con Peinado como contraria, lo mismo para Leonel que tendrá a dos granadinos que intentarán ganar la medalla de oro, actualmente con mejores marcas que el nuestro.
Estan olvidando las conditiones, caros, las conditiones! Yo estuvo a Londres y la fria fue una constante. Un dia, la lluvia no paro. Mismo el viento, non siempre se mostro amistoso… Les pergunto, de los dos mil y tal atletas presentes quantos lograram marca personal?
Perdoname my pobre espanol (y el teclado britanico tampoco aiuda).
Pedro
Análisis estadístico, incompleto que tiende a confundir, sería importante, para que el análisis produzca mas información, ver el comportamiento de los 8 finalistas en cada disciplina ( ESE EL EL MUNDO) y entonces comprarlos con los cubanos, dar la diferencia en unidades de medidas también crea confusión ¿ por qué no darlo en %) sería más real. No todas las disciplinas se comportan igual en las competencias principales, son muchos las variables diferentes, para los saltos, los lanzamientos, las carreras de velocidad y las de velocidad prolongada. Ese es un tema complejo y creo que no hay entrenador que pueda decir que domina sus interioridades, cada atleta es diferente y cada momento es irrepetible. Pero se debe continuar trabajando a mi modesta opinión en tal sentido.
BIRMINGHAM- Garrocha 1- Katerina Stefadini Grecia 4.75, Disco femenino 1- Sandra Perkovic Croacia 67.51 Triple femenino 1- Caterine Ibarguen Colombia 14.41 2-Yulimar Rojas Venezuela &-13.94 110 metrosc/vallas 1- Aries Merritt USA 13.29 2- Segey Suhbenkov Rusia 13.31 5-Orlando Ortega Espana 13.48 ,100 femenino 1- Elaine Thompson 10.93 2- Marie Josee Ta Lou IVC 10.97 6-Dafne Schippers Holanda 11.22.
Precisamente de eso se trata al publicar un artículo como este, es lo que llamaríamos poner el dedo en la llaga. En otros periódicos cubanos ponen antes de la competencia que habrá una, pero después, muchas veces ni los resultados aparecen.
Si no se señalan los problemas continuarán con el lema de que se cumplieron las expectativas y que se fogueó a los atletas con vistas a los Centroamericanos, y lo que pasa en un mundial no se analiza, no se critica, no se tiene en cuenta para la temporada siguiente.
LIGA DIAMANTE BIRMINGHAM Disco Femenino 1- Sandra Percokovic Croacia 67.51, 2-Denia Caballero Cuba 65.24 ,3- Yaime Perez Cuba 65.11
Buenos todos los comentarios, yo solo quiero decir coming es posible que digan, que el mundial es preparatorio con Vista s unos Centroamericanos por favor………..
Esa es la pregunta que nos hacemos todos nosotros. ¿En qué otro país se dicen cosas similares sin que separen del cargo al autor de la frase? Esa filosofía deportiva es tan ridícula que de verdad no vale la pena comentarla.
Solo resta decir que los dirigentes del INDER parecer haberse quedado dormidos hace unos 50 años y siguiendo el ejemplo de la Bella durmiente no piensan despertar hasta que no hayan pasado otros 50 por lo menos.
Estoy tan cansado de los Centroamericanos que si yo pudiera no participaria o cuando mas lo haria con atletas juveniles solamente. Ahora esperar la lucha con Mexico y Colombia por el primer lugar…. con eso nos entretendran en el 2018, que pocos competitivos.
Creo que a todas las personas normales nos pasa lo mismo. Es que aunque sean los juegos regionales más antiguos del mundo, pero el mundo está constantemente cambiando, menos el deporte cubano que se aferra a las costumbres, mientras más anticuadas mejor.
Si yo fuera atleta me daría vergüenza ganar en unos Centroamericanos y después ir a un mundial a que todos los latinoamericanos me aventajasen. Los Centroamericanos deben servir para darles fogueo a los equipos que van desarrollándose, así ganan en acople y para atletas de deportes que a nadie le interesan, para que por lo menos ahí tengan la oportunidad de competir, pero en los deportes olímpicos, estaría bien llevar a los jóvenes o a los atletas de segundo o tercer nivel a probarse en competencias internacionales, sin mucha presión.
Quizás esa filosofía tan desafortunada de priorizar los eventos de menor valor para que el INDER pueda vanagloriarse de que continuamos siendo una potencia deportiva «mundial», sea una de las razones para el abandono de la delegación o bajas de la preselección, mientras que aquellos que no se marchan, ya que supuestamente no están inconformes con esas cosas, muestran su decepción por medio del desinterés. También pudiera ser posible que para esos eventos el INDER les ofrezca mejores condiciones de entrenamiento. No sé. es que me parece muy extraño lo que está sucediendo por ejemplo con Denia Caballero que precisamente el año de su irrumpir en la élite mundial fue un año con Juegos Panamericanos y después qué?