Escasas son las horas que nos separan desde que la cubanita Yorgelis Rodríguez cumplimentó una actuación exitosa, que le valió el oro en el heptalón del 14to Campeonato Mundial Juvenil de Atletismo. La guantanamera, pupila de Gersin Luis Castro, logró concretar 5966 puntos y venció en la difícil prueba que busca a la atleta más completa. Otra cubanita, Yusleidys Mendieta finalizó en la décima posición con 5514 puntos.
Con la gestión pertinente de su preparador, hace minutos conversamos vía Facebook con la novel campeona cubana, quien hizo las siguientes declaraciones a Deporcuba:
¿Cómo estás?
Muy bien y muy feliz por este resultado
¿Pensaste en el oro antes?
No tenía en los planes la de oro, aunque sabía que tenía condiciones para estar entre las primeras. Pero es una competencia muy fuerte y depende de lo que sea capaz de hacer cada atleta en el momento del evento.
¿En qué momento tomaste conciencia de que podías hacerte con el título?
Cuando logré 1.81 en el salto de altura (4to evento) comencé a ver que el camino se despejaba bastante. Sin embargo quedaba toda una jornada de competencias y sabía que tenía que hacer las cosas bien.
Comparando este registro (5966puntos) con tu marca personal que es de 5994 puntos (Mayo, La Habana). En qué eventos cediste en esta ocasión.
En la impulsión de la Bala y en el Salto de Longitud. Estoy de cierta manera inconforme con el primero porque esperaba mejorar mucho en la bala pero las cosas no funcionaron como hubiera querido en esa prueba.
¿Qué pasó por tu mente cuando te supiste ganadora?
Tuve la sensación de haber alcanzado un sueño y a la vez pensé en que todo el sacrificio que hacemos diariamente no había sido en vano.
Alguien especial que haya cobrado protagonismo cuando se materializó el triunfo.
En ese momento recordé a muchas personas pero el primer lugar es para mi entrenador, que es quien a diario lucha por inculcarnos el amor por el deporte y el espíritu de superación. Pensé en la Revolución y en el Comandante en Jefe que me lo han dado todo para llegar a conseguir este triunfo. También en mi familia, que ha luchado mucho para que yo sea alguien en la vida. Fue un momento especial, porque es el momento en el que una siente que ha devuelto ese esfuerzo que se pone cada día sobre nuestra formación y superación.
¿Metas?
Seguir luchando para superar la barrera de los 6000 puntos.
Los 5966 puntos rubricados por Rodríguez en Barcelona constituyen la marca mínima B requerida para participar en la cita olímpica, pero las inscripciones ya han sido cerradas así que será Rio 2016 el posible escenario para el debut de esta campeona.
Ojalá le dejen a Yorgelis el tiempo necesario para desarrollarse. En los eventos múltiples me parece que se acostumbra a quemar etapas. Si vemos el caso de Yordani García que antes de cumplir los 19 años logró una puntuación superior a los 8200 y al record mundial júnior vigente, pero después solamente ha mostrado poco y sobre todo en las competencias mayores está siempre entre los del montón, y no entre los punteros. Me pregunto, ¿qué no ha funcionado bien?
Es cierto que todo atleta tiene sus límites, pero en el caso deYordani me cuesta creer que a los 20 años cuando casi sobrepasó los 8500 puntos, ya haya tocado techo.
A la hora de realizar ese tipo de análisis hay que calcular muchas cosas, es cierto que se queman etapas pero también hay que controlar que los atletas en la mayoría de los casos vienen de zonas bien alejadas y pobres, cuando llegan a la habana, viajan y manejan algo de dinero se quieren comer el mundo……. este chico Yordanis es un fiel integrante de los Guaracheros de regla, es común junto a varios de sus compañeros verlo en la Macumba, en el Capri reguetoneando con gente de zona y los salvajes por lo tanto se desconcentran, no descansan y el tiempo, las competencias y los resultados no esperan por nadie……..
Lo mismo decían hace muchos años de Sotomayor, pero bueno por ser el mejor del mundo en sus tiempos, podía quizás darse ese lujo de entrenar menos y celebrar más que sus contrarios o de desconcentrarse para al final alcanzar más o menos lo mismo.
Pero quizás eso sería importante si se combatiese, se debería sensibilizar al atleta a que se concentre en sus objetivos deportivos, por lo menos durante los años en los que está al máximo en lo físico.
Me imagino que cuando viajan al extranjero tendrán seminarios de preparación de todo tipo para decirles lo que se puede o no se puede hacer o decir. Pues, ¿por qué no trabajar también en ese sentido con los jóvenes que viven alejados de su familia?
Quizás con incentivos se podría aumentar la disciplina. No solo castigar las indisciplinas. En las competencias internacionales muchas veces se pagan premios en moneda.
Pero si ganas o pierdes, da igual, porque te dan lo mismo. ¿Qué motiva al atleta entonces a mejorar sus resultados?
Parece que para muchos los viajes al extranjero o participar en las competencias son el principal objetivo, aunque ese no es un problema único de Cuba