Por Lilian Cid Escalona/ CubaxDentro
Podría hacerle los honores –nuevamente-y presentarlo como el Lic. Reynaldo Cruz, graduado en Lenguas Extranjeras en 2007 y tal, pero prometí saltarme los tecnicismos protocolares y otorgarle el poder a sus palabras, a su historia. Y es que el creador de Universo Béisbol, pese a haber dado pasos agigantados con su proyecto, mantiene intacta su capacidad de soñar, esa que lleva a reinventarse y a sortear todos los obstáculos a fin de poner su granito de arena en pos de hacer del béisbol, un deporte más universal.
Desde que tuve la oportunidad de conocer el magnífico proyecto que es Universo Béisbol (UB) mucho ha llovido y, conforme pasa el tiempo, tanto tus aspiraciones como el alcance de las ideas que despliegas va en aumento. ¿Qué tal si desempolvamos los inicios, conversamos un poco de cómo nació la idea, de su evolución, y de paso, actualizamos sobre el momento que viven UB y Reynaldo Cruz?
«En realidad, el proyecto nació o se engendró de manera inconsciente cuando era profesor de inglés en la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI). Recuerdo que comencé a recibir reportes de la Liga Japonesa de Béisbol y me dediqué a traducirlos y hacerlos llegar por correo a mis alumnos, colegas y amigos. Poco después conocí a Tania García (periodista de la Dirección de Comunicación de la UCI), que me dio la oportunidad de llevar las incidencias del Clásico Mundial de Béisbol para la Intranet de la Universidad de Ciencias Informáticas (UCI).
Cuando comencé a trabajar como traductor del periódico ¡AHORA! de Holguín, y luego de haber escrito una vez para la página web y otra para el periódico impreso, Karina Marrón y Nelson Rodríguez insistieron en que me abriera una página personal. Lo que había estado haciendo en la UCI se me había quedado grabado y creo que fue ese el
detonante que me llevó a hacer una revista, que comenzó de manera rústica, con apenas ocho páginas.
Con el aumento de columnistas, dígase Ton Hofstede (primer extranjero), Jim Allen, Chris Kabout, Matt Nadel, Haley Smilow, y más recientemente Marlys Rodríguez, Raico González, José Acosta, Peter Bjarkman o Bill Nowlin (por solo citar algunos nombres de los que me han aportado algo) la revista ha ido creciendo y ganando en credibilidad y preferencia.
Poco a poco yo mismo (que hago el diseño y no he tenido capacitación para eso) he ido perfeccionando la forma en que se ve y mejorando la apariencia. Creo que he hecho un trabajo duro, porque suman ya hasta la edición de octubre 55 números ininterrumpidos, y aún con problemas de salud, técnicos o de tiempo por asuntos de trabajo, Universo Béisbol se ha atrasado, pero nunca ha fallado.»
Si tenemos en cuenta que UB tiene un lugar en la plataforma de blogs de la MLB, y está considerado un sitio de referencia cuando de béisbol cubano, latino e incluso japonés se trata, entonces tenemos que decir que el proyecto ha dado pasos de gigante. ¿Compartes las claves?
«Creo que no ha habido ninguna en específico. Ha sido el resultado de hacer las cosas sin prejuicio de ningún tipo, ser lo más fiel posible a la verdad y trabajar muy duro.
Creo que si todo mi tiempo fuese para Universo Béisbol habrías mencionado media docena de ligas más en tu afirmación anterior. Ha habido una enorme cantidad de contratiempos, sobre todo en asuntos de conexión (tiempo y calidad de la misma), pero siempre me las he arreglado para salir a flote.
Lamento mucho, por ejemplo, tener algo listo y no poder publicarlo a tiempo por falta de Internet, sobre todo los fines de semana, en los que en ocasiones suceden cosas que no pueden esperar para publicarse. Incluso, a veces, disminuye el deseo de hacerlo porque alguien más ha escrito un trabajo parecido y ha podido publicarlo antes, entonces uno puede quedar como un copiador. Esto, por supuesto, me ha obligado a ser más creativo, y fuera del equipo de Holguín, al que sigo con fervor, pero sin apasionarme, no tengo fanatismo ninguno. Lo que está bien está bien, y lo alabo, y lo que ante mis ojos está mal, lo critico sin pensarlo dos veces. Probablemente por ello la AFP citó uno de mis trabajos tras la derrota en la Serie del Caribe: no fueron palabras de despecho por el desastre que vivieron los peloteros cubanos, sino palabras que llevaban lo que a mi juicio tenían que llevar.
Sobre las ligas extranjeras pasa lo mismo: no tengo compromiso con ninguna de ellas
(aunque me gusta mucho la japonesa por mis intereses hacia esa cultura y ese idioma), y a los jugadores no los critico por su desempeño, sino por su conducta.
El que no haya visto venir una recta de más de 90 millas por hora en su dirección, no tiene idea de lo que enfrenta un jugador en el quehacer diario. Creo que la clave de todo ha sido que, como me dijo Sigfredo Barros recientemente, no tengo
fronteras.
¿Qué te deja?
«Por encima de todo, creo que Universo Béisbol me ha hecho crecer como persona y como profesional. Hoy me cuesta trabajo imaginarme mi vida sin tener que pasar horas de mi tiempo libre delante del ordenador escogiendo los materiales, y creo que escribir de béisbol más que un hobby se ha vuelto una necesidad.
Por otro lado, creo que tengo una enorme deuda con los lectores que me han apoyado y me han criticado, porque lo hacen porque comparten conmigo la pasión por este gran deporte. Incluso los críticos, los que lo han hecho con respeto, han salido en mi defensa dentro del blog cuando alguien me ha ofendido, y eso creo que vale mucho, porque demuestra que aunque no concuerden con mis criterios respetan mi trabajo. Los seguidores, que por cierto son varios, han estado conmigo en las buenas y las malas, y creo que no habría logrado nada de no haber sido por ellos.
También, la exigencia de los fanáticos del béisbol es altísima, y esto me ha
obligado a ser más incisivo, más objetivo, más crítico, más veraz, a confirmar las informaciones, a intentar superarme y mejorar mi estilo.
Pese a que no he recibido preparación periodística alguna, creo que UB ha sido la mejor escuela de periodismo que podría haber tenido.»
De Licenciado a Lenguas Extranjeras a un personaje a tener en cuenta en los procesos de conformación del nuevo proyecto del Salón de la Fama del béisbol en Cuba ¿Nos explicas un poco cómo ha sido este viaje?
«En realidad, sin arrogancia, creo que era una de las personas que debía ir luego de casi cinco años hablando del Salón de la Fama. Incluso varios meses antes de comenzar a circular Universo Béisbol ya había escrito sobre el tema en la web de ¡AHORA! en un trabajo que se replicó en el Portal Cubasí.
Cuando recibí la invitación me dio una alegría inmensa, sobre todo porque supe que iba a ser parte de la historia, del rescate de algo por lo que había abogado desde antes de ser Reynaldo Cruz el de Universo Béisbol, aunque siempre fui y soy defensor del Palmar de Junco. Llegar y ver que varias personas sabían quién era yo, aun estando en Holguín, lejos de la capital, me dejó buenas sensaciones.»
A propósito del Salón de la Fama del Béisbol Cubano ¿Cuáles son tus impresiones al respecto?
«En realidad quedaron algunas insatisf
acciones entre los presentes, pero lo más importante fue que se dio el audaz paso de efectuar una votación para elegir peloteros al Salón de la Fama del Béisbol Cubano luego de 54 años.
A pesar de las posibles contradicciones entre el Palmar de Junco y el Centro Recreativo Juvenil José Antonio Echeverría (antiguo Vedado Tennis Club) existe el consenso de que el Museo y Salón de la Fama del Béisbol Cubano debe ser construido lo antes posible, pues no debemos seguir dándonos el lujo de que se siga perdiendo parte de la historia de nuestro deporte nacional.
Fuera de las Grandes Ligas estadounidenses, ninguna nación, ni siquiera Japón, cuya liga cumplió 80 años en esta temporada, tiene una historia tan rica, amplia y hermosa como la nuestra.
Cuba aportó el primer pelotero latino en la historia del béisbol profesional y de las Grandes Ligas, que por cierto fue electo en esta votación: Esteban Bellán; Cuba aportó además el primer pelotero latino en Japón, Roberto «Chico» Barbón. Además, los cubanos llevaron el béisbol a varios países de América Latina, y por mucho tiempo dominaron las competencias internacionales. No tener un Museo y Salón de la Fama ha sido imperdonable, injusto y poco inteligente.»
En esto del periodismo eres un aficionado, aunque en lo personal te avalaría como profesional de este mundo, sin embargo, ahora te pido opinión desde el punto de vista de un consumidor más de la información que se genera desde nuestra isla. ¿Cómo valoras el accionar actual del periodismo deportivo cubano?
«Uno no debe ser juez y parte, y criticar al periodismo deportivo cubano es en cierto modo complejo, pero como oficialmente no soy periodista puedo hablar al respecto. Creo que falta preparación, seriedad y hasta ética en el trabajo. La narración de la pelota en Cuba es totalmente parcializada en favor de jugadores y equipos, y esto deja evidentemente mucho que desear. Cuando se trata del béisbol internacional, hay muchas evidencias de que nuestros narradores no se preparan y no investigan como deberían, y ello es bastante lamentable. No se trata de, como dicen ellos mismos, «hacer periodismo de su trabajo», el problema es que cuando el trabajo es serio y tiene pocas fisuras es difícil de criticar. ¿Cómo es posible que no hayan sacado cuentas de que el lanzador de los Piratas Gerrit Cole fue el mismo que le lanzó siete entradas sin carreras a Cuba en la final del Mundial Universitario de 2010, o que el tercera base de los Reales Mike Moustakas jugó contra Cuba, o que el Chris Carpenter que lanzó por los Cardenales hasta hace poco NO es el mismo que estaba en el equipo de Estados Unidos durante el famoso Mundial de 1988?
Y estas son solo algunas evidencias de que falta investigación profunda, y que muchas de los datos que se dan sobre un jugador de manera rápida son informaciones leídas de un papel impreso a la ligera.
Una de las cosas que veo como sus mayores problemas es a la hora de entrevistar y confrontar a un atleta. En ocasiones les preguntan cosas que requieren respuestas algo poéticas, o elaboradas, por así decirlo, y ponen a los deportistas en un aprieto. La gente en la calle se burla de las palabras de nuestros atletas, porque casi todos dicen prácticamente lo mismo, y es que les han hecho preguntas que obviamente los obligan a dar esas respuestas. Son vicios que se han ido creando, y que nos afectan incluso a nosotros, los que no tenemos esa formación, porque nos hemos visto haciendo la misma clase de preguntas. Es como si tuvieran preparado el cuestionario para no importa qué atleta, y las interrogantes no discriminan entre un deportista y otro. Pienso que las preguntas sobre cosas técnicas, como si el bateador cambió para un bate más liviano en ese turno importante, o si el lanzador decidió utilizar más rompimientos en un inning determinado porque estaba cansado o no tenía dominio en la recta, o si se trabajó mal a un bateador de manera deliberada, por poner algunos ejemplos… Creo que esas son preguntas que podrían tener respuestas más sólidas y contundentes por parte de los atletas, y harían que las entrevistas fueran más atractivas, y obligarían al público general a estar más preparado y a ver todas las entrevistas, porque nunca van a saber lo que se va a preguntar.»
Sobre la prensa escrita, creo que ha tenido mucha más audacia y contra ellos atenta el hecho de que en muchas ocasiones no pueden decir más por cuestiones de espacio. En el caso de algunos espacios radiales han desterrado de su trabajo el prejuicio, pero mientras la decisión de que un periodista viaje al extranjero con una delegación siga dependiendo de personas que muestran falta de visión, objetividad y sentido común, muchos de ellos no van a tener la audacia suficiente para tocar ciertas cuestiones que pueden ser medulares y complejas.»
¿Cómo se visualiza la situación del béisbol cubano en el futuro inmediato?
«En mi opinión no es prudente para la Serie Nacional para ir a Veracruz, como tampoco es prudente que hayamos decidido llevar el mejor equipo que se podía hacer. Creo que Yulieski Gourriel, Alfredo Despaigne y Frederich Cepeda merecían un descanso, sobre todo este último, que llevaba un desgaste tremendo. Pero se trata del último reducto: Cuba lo ha perdido todo, nos fuimos de los Juegos Olímpicos con una plata ante Corea del Sur, nos fuimos de las Copas Mundiales con una plata ante Holanda, caímos en la segunda del Clásico también ante Holanda, perdimos en la semifinal de los Juegos Panamericanos ante Estados Unidos… sin contar a los norteños, las otras derrotas vinieron ante países que no tienen el béisbol como deporte nacional, lo cual lo hace más vergonzoso aún. Creo que el desespero de la directiva actual del béisbol por recuperar terreno perdido, o por no perder lo único que se había mantenido sin perder en los últimos 25 años los ha llevado a la misma situación de los 90, cuando Cuba lo ganaba todo porque iban a todos los torneos con lo mejor que tenía. Esto me parece imprudente, porque uno no debe mostrar todas sus cartas todo el tiempo, y si bien se ganó de manera categórica e invicta, una derrota en este caso podía haber provocado que se desplomara aún más la moral del béisbol cubano y las esperanzas de la afición. En el futuro lo que nos espera es seguir como en los últimos tres años: ganando torneos de poca monta y cayendo en los duros de verdad, a menos que haya una revolución en la pelota cubana.»
Hay una situación puntual que se ha agudizado en los últimos tiempos y es la referente a las constantes bajas que sufren los equipos. ¿Hay manera de poner freno a esto? ¿Estamos a tiempo?
«Creo que es una situación que no va a cambiar, porque la economía cubana no permite que los peloteros cubanos tengan los salarios que se han estado ofreciendo en las Grandes Ligas. Hace tres años, fue un escándalo que Yoenis Céspedes, Jorge Soler y Yasiel Puig hubiesen firmado entre los tres por casi 100 millones de dólares, y hoy se rumora que sea esa la cifra por la que firmen a Yasmani Tomás solamente.
El mercado de peloteros cubanos en las mayores se ha encarecido debido al éxito de algunas figuras, y esto hace que sea mucho más atractivo para los que están acá irse a buscar la fortuna.
Por otro lado, los fichajes autorizados por la Federación Cubana han sido lentos, y aun así, no han tenido la visión de estimular a los que han conseguido sus fichajes por su cuenta, como el caso del holguinero Raudelín Legrá, que está sin jugar luego de regresar de Francia. Me parece que las autoridades del país deben ser más proactivas al respecto y buscar otros mercados para promocionar su talento.
Los casos de Cepeda, Gourriel y Despaigne pueden significar atractivos para otros equipos, que ya deben estar pensando en qué jugadores cubanos fichar. Esto puede hacer que las cosas cambien un poco pero no del todo. Hay que dar un tratamiento y un seguimiento a esos peloteros, porque a pesar de que están recibiendo mucho dinero, les suceden acá en Cuba co
sas que los decepcionan, y que está en manos de quienes los representan resolverlas… Entonces un atleta se va del país cuando aparentemente lo tiene todo (o mucho más que la gran mayoría, para ser más exactos) y la gente se pregunta por qué lo hizo, cuando las respuestas están más que claras.»
Cuba es el país latino con mejor béisbol ¿Compartes este criterio?
«José Dariel Abreu fue el Novato del Año por decisión unánime sin haber pasado jamás por ningún circuito profesional entre Cuba y las Grandes Ligas. A pesar de la situación actual, hay muchos peloteros cubanos brillando en la Gran Carpa, y de ser diferentes las relaciones entre ambos países serían muchos más. Creo que muchos de los que han decidido y deciden quedarse acá por la razón que sea podrían haber jugado o pueden jugar en las Grandes Ligas. Contrario a lo que muchos piensan, abrir la puerta a los cubanos beneficiaría a ambas partes.
Estados Unidos se quitaría de encima un problema enorme que tiene con el tráfico de personas y Cuba podría contar con estos peloteros en competencias internacionales como el Clásico Mundial de Béisbol. Hoy la mayoría de los que se van en busca de las Grandes Ligas lo hace de manera ilegal, arriesgando su vida y cayendo en las trampas de personas inescrupulosas.
La liga cubana no se debilitaría, al contrario: muchos jóvenes con aptitud no practican el béisbol porque no ven en él una solución futura a sus problemas más elementales, mientras que una buena parte de los que sí practica lo hace con sus miras puestas en abandonar el país para jugar en las Mayores. No obstante, Cuba sigue siendo de los mejores en el orbe, y si bien no se ha ganado nada de peso en ocho años, se avanza y hasta se discute el cetro en unos cuantos torneos. De haber circunstancias diferentes, los cubanos serían mayoría entre los extranjeros que enriquecen los rosters de las Mayores. Y bajo otras circunstancias también propiciarían que algunos jugadores que están hoy en la Gran Carpa jugaran con el equipo nacional.»
Si te pido un equipo Cuba Ideal, ¿Cuál sería tu elección?
«Bueno, el receptor sería Brayan Peña, el primera base José Dariel Abreu, el segunda base José Iglesias, el torpedero Yordán Manduley, el tercera base Yulieski Gourriel, los jardineros Alfredo Despaigne, Leonys Martín y Yasiel Puig o Alexei Bell, el designado sería Frederich Cepeda, los abridores serían Freddy Asiel Álvarez, Julio Alfredo Martínez, Norge Luis Ruiz, Yosvani Torres y Roennis Elías, y los relevistas serían Aroldis Chapman, Yaisel Sierra y Héctor Mendoza.
¿El director?
Bueno, sin demeritar el papel de un manager, creo que hasta yo podría ganar con ese equipo.»
Y para concluir, una situación. Imagina que el béisbol regresa a los Juegos Olímpicos. Que habrá bolas y strikes en Río 16. Tu equipo para ganar allí y quizás más allá, en el Clásico Mundial de 2017.
«Claro, que estas proyecciones son teniendo en cuenta que algunos jugadores podrían tener evoluciones favorables como para convertirse en regulares. Habría que pensar con un poco más de visión futurista.
Pero te doy un equipo parecido al que te dije en la pregunta anterior, aunque voy a excluir a los ligamayoristas –teniendo que asumir la posibilidad de que algunos se vayan del país–. El receptor sería el matancero Onel Vega (mirando con visión futurista), en la inicial ubicaría a Ariel Sánchez (sí, no te asustes); el segunda base sería David Castillo, el torpedero estaría entre Manduley y Luis Alberto Valdés; el antesalista debería ser Lourdes Y. Gourriel. En los jardines ubicaría a Yadiel Hernández, Víctor V. Mesa y Roel Santos, el designado sería Alfredo Despaigne.
Los lanzadores serían Norge Luis Ruiz, Cionel Pérez, Freddy Asiel Álvarez, Yusmel Velázquez y Julio Alfredo Martínez, con Yaisel Sierra y Héctor Mendoza como relevistas.»
¿Te queda algo para agregar?
«Me gustaría agregar que el éxito de Universo Béisbol ha sido el resultado de un trabajo muy duro, que podría ser mucho mejor si existiera más apoyo de gente dentro de Cuba. De veras me gustaría que el proyecto creciera y que muchas más personas en el país se involucraran. Aunque parezca extraño, ha sido más fácil conseguir el
apoyo y la cooperación de personas fuera del país que dentro, lo cual impacta bastante. Las puertas del proyecto están abiertas para todo aquel que quiera hacer algo a favor del béisbol cubano y universal, para todo aquel que quiera globalizar todo lo que tiene que ver con este hermoso deporte. Cuenten conmigo y cuenten con Universo Béisbol para hacer de este un deporte más universal.»
Fotos tomadas por Reynaldo Cruz
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