Por Noel David Suárez
Finalizan los XXIV Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023 y son muchas las historias para contar, la mayoría de ellas cargadas de entrega y ansias por el triunfo, por ese deseo que impera en cada atleta de pasear su bandera por el escenario deportivo en que se desempeñe. Cuba dejó grabada una amplia gama de actuaciones dignas de aplaudir, no siempre compensadas con la medalla de oro, pero dieron muestra del valor competitivo del que están hechos nuestros representantes.
Una de esas bonitas hazañas la protagonizó el equipo femenino de balonmano. En un torneo muy parejo y una final de infarto las muchachas de Cuba dieron la alegría que todos esperábamos. Hoy tenemos el lujo de contar con una de las protagonistas de esa victoria, el cerrojo del equipo, la guarda meta Niurkis Mora, toda un baluarte bajo los tres palos.
Con Niurkis conversamos vía whatsapp y nos envió sus testimonios sobre este anhelado título. A continuación les presentamos la historia del oro del balonmano femenino, contado por una de sus protagonistas, en exclusiva para Deporcuba.
“Nuestro equipo estaba pasando por una situación complicada días antes de que llegáramos al Salvador. Nos sobrepusimos a eso en solo par de días y continuamos el camino para alcanzar el objetivo final.
El propósito de alcanzar el oro estaba engendrado en cada una de nosotras y más en las que estuvimos en Barranquilla 2018, cuando alcanzamos el bronce y nos dimos cuenta que teníamos para más.
Con sinceridad te cuento que el equipo junto a los entrenadores disfrutamos al máximo la fiesta centro caribeña, agradecerle al Salvador por su ardua labor y la valentía para no perder la posibilidad de que se realizara el evento.
De la competencia, pues qué te puedo decir. Estábamos consientes que teníamos buenos rivales y que venían por nosotras, pues participamos en la Copa Caribe celebrada en Dominicana y quedamos campeonas. Allí participaron los cuatro equipos que en estos juegos fueron los cuatro finalistas.
Estuvimos meses antes en Brasil en una base de entrenamiento y allí jugamos varios partidos de preparación. Empezamos a trabajar las deficiencias que tuvimos en la Copa cuando nos enfrentamos a estos equipos, porque jugando entre nosotras como preparación no podíamos evaluar el rendimiento.
Desde entonces mi rendimiento estaba creciendo, trabajé mentalmente en la preparación para los Juegos que era nuestro principal objetivo. Luego participamos en el clasificatorio al mundial y no logramos llegar a la meta.
Pero el equipo se fortalecía ya que se estaban integrando las chicas que estaban en el extranjero”.
Ese partido final ha significado mucho para mí, creo que es el mejor partido de toda mi carrera deportiva, por la importancia que tenía y por mi actuación….
Sin dudas una medalla de oro para recordar en un deporte que cumplió por partida doble, pues los muchachos también hicieron la tarea y le aportaron a la delegación cubana otra dorada.
¡Felicidades Campeones!
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