voleyBrasil_Cuba Por Andy Bermellón Campos/DeporCuba

 

En la jornada de cierre de las acciones del grupo B del Mundial de Voleibol Masculino, cubanos y cariocas reeditaban la final de hace cuatro años en Italia 2014. Por supuesto, ambos con un panorama muy diferente, pero con la rivalidad y combatividad que caracteriza a este duelo latinoamericano.

El choque presentaba a un Brasil como cabeza de grupo, amén de cuatro victorias sin derrotas y a un equipo cubano necesitado de puntos y victorias, para firmar su acceso a la segunda ronda del certamen como cuarto clasificado. Los cubanos sorprendentemente superaron en el set inicial a los cariocas (25-22), con un potente servicio y buena defensa de campo, que posibilitó un ataque certero de los antillanos, bien dirigido por el pasador Leandro Macías, donde se destacaron el opuesto Javier Jiménez y el central Isbel Mesa.

En la segunda manga del partido el equipo cubano se mostró incesante en su juego, pero los continuos errores en servicio- condicionado por la efectividad de este orden de juego en el primer parcial- esfumaron la pequeña ventaja de tres puntos sobre el cuadro auriverde, que igualó las acciones a la altura del punto diecinueve, para imponerse finalmente (25-23), e igualar las acciones en el partido.

El tercer y cuarto set trajo la reacción carioca quienes impusieron su experiencia y calidad para frenar el despertar de los cubanos en los dos primeros set. Los brasileños estabilizaron su juego, empleándose fundamentalmente en la potencia del servicio y el trabajo en la net, en los momentos decisivos del partido. Para dominar el partido y llevarse cómodamente los parciales con marcadores (25-18) y (25-17).

La escuadra antillana vio reducida sus opciones ante un rival superior, donde nuevamente la desconcentración y la inexperiencia de la joven escuadra cubana no funcionaron en los momentos importantes del partido, cometiendo cuarenta y cinco errores, por solo veintitrés sus rivales.

La nota más alta por los cubanos la protagonizó el central Isbel Mesa con 16 puntos -13 en ataque y tres en bloqueo- secundado por el joven Javier Jiménez con once, mientras por Brasil , Sidao lograba veinte puntos. Cabe destacar que ambas selecciones realizaron un buen trabajo en la net con 21 bloqueos efectivos, once para la escuadra del gigante sudamericano y diez para los de la Mayor de las Antillas.

A pesar de la derrota el equipo cubano demostró una nueva cara y deseos de jugar ante un rival muy exigente como Brasil. Según Eddy Quiñones desde la sede del mundial este fue la mejor presentación de los antillanos en tierras polacas y donde los jugadores mostraron ganas de hacer un buen papel.

Los pupilos de Rodolfo Sánchez presentan un balance de dos victorias y tres derrotas, tras caer en sus primeras presentaciones ante Finlandia (3-2) y Alemania (3-0). Logrando encausar el rumbo, tras superar a los conjuntos con menos posibilidades del grupo, Corea del Sur (3-1) y Túnez (3-2) y ceder en el último partido ante el invicto Brasil (3-1).