Por: Carlos Hernández Luján/ Facebook
Terminarán los Juegos y vendrán las críticas, sustituciones, pedidos de cuentas, explicaciones; lo típico para situaciones de este tipo en mi bella Cuba. Pero, ¿será esta la solución?
Desde Ponce 93 con 227 medallas de oro la actuación deCuba en los Juegos Centrocaribeños no ha dejado de caer, salimos del segundo en los Panamericanos y en las Olimpiadas son cada vez más lejanas nuestras opciones. Barcelona 92 con 14 de oro, ya es un sueño para otro siglo.
El Mundo, el deporte, la ciencia avanza y repercute en el deporte pero en el nuestro va más lento, al menos debería ayudarnos a mantener lo que logramos hace años.
Perdimos cientos de deportistas por lentitud, inercia, robo, perdimos futuro, perdimos arroz, literas, guaguas escolares, combustible, horas de activistas, experiencia única de entrenadores, sudor, dinero del país depositado en esperanzas de mantener un ejemplo deportivo ante los grandes acaudalados del Mundo que con su dinero y desarrollo se quedaban corto ante el valor y ADN de campeones de los nuestros.
Pero tras la loable actuación de Barranquilla resalta un equipo de balonmano masculino que constituye un ejemplo a seguir para todo el deporte nacional donde se mezclan 13 jugadores de ligas internacionales con otros del patio. Juventud con experiencia. Viven algunos en Europa, se les pidió ayuda para Cuba y aquí están. Incluso hasta desde el punto de vista de Dirección llega el apoyo con la leyenda Julio Fis.
El Balonmano tiene un paso por delante en el movimiento deportivo cubano gracias a la nueva política de contratación. Trabajan ellos mejor, se mueven más sus directivos? Aprovechan una política de contratos que promueve el juego por encima del dinero para los jugadores cubanos.
Lo cierto es que el Balonmano cubano vuelve a ser rey en el continente y dice su entrenador Delisle que después de Japón estaremos entre los tres mejores del Mundo.
Entonces, si tenemos un primer equipo internacional cubano, un ¨experimento que funciona¨, que esperamos para hablar, convencer y traer a todos aquellos deportistas cubanos que pudieran reforzar el movimiento deportivo nacional. Llegarían bajo nuestras condiciones, reglas, previo análisis de todo lo que haya que analizar para estar aquí pero LLEGARÍAN.
Muchas gracias a Deporcuba por brindar a tantos que quisieran alzar zu voz, pero de momento lo hacen por escrito, para dar el visto bueno, desde el punto de vista de los aficionados, a la política de confiar en los atletas cubanos, residan donde residan y al mismo tiempo criticar o promover para que otras federaciones hagan lo mismo.
Cuando veo que en el mundial de voli femenino en una de las categorías inferiores nuestro equipo mejoró solo un puesto en dos años y si fuera en el rango de las medallas o entre los ocho primeros, estaría bien, pero no, la mejoría ha sido dentro del grupo de la retaguardia, o sea jugando contra los equipos más débiles que asisten a un mundial. Y todos sabemos que al mundial van equipos más débiles que otros que no pudieron asistir, por las cuotas continentales. Entonces me pregunto hasta cuándo tendremos que esperar. Estamos viendo despilfarrar el dinero, llevando a las mismas muchachas a todas las categorías, y para la de adultos les queda la ropa todavía muy grande, o sea que fogueo son sentido sí es bueno, pero con esos rendimientos, se van a acostumbrar a que les dé igual y como que no hay equipo mayor estable, todas o muchas tendrán la suerte de integrarlo, cuando más económico sería luchar por recuperar a las antiguas jugadoras, como se ha intentado con los hombres, la FCV se dio el lujo de sancionar a Melissa por dar un ejemplo con lo que acabó con la carrera de la última posible estrella cubana del voli femenino.
Claramente se ve la respuesta a la interrogante del artículo de si se mueven más los directivos del balonmano que los otros. Los análisis para decidir si integran el equipo me parecen muy exagerados. Para Simón y los demás se necesitó porlo menos un mes para decidir, a pesar de que era una situación que todo el mundo deseaba que llegara. Entonces por qué tanto tiempo para decidir. Se supone que un directivo deportivo a nivel nacional debe de ser una persona inteligente, con una capacidad de asimilación rápida y que no espera a que se dé el acontecimiento para empezar a pensar cómo reaccionar, sino que es capaz de anticiparse a la situación. Si no tienen esas aptitudes, entonces con cuáles se ganan algunos el derecho a desempeñar esas funciones en el movimiento deportivo cubano. No todo buen deportista es buen dirigente deportivo o entrenador. Si se conocía con antelación de la situación se preparan las reglas para la reinserción, por supuesto que tienen que ser reglas aceptables para los atletas interesados y no reglas para quitarles las ganas a posibles futuros regresados.
Quizás esa sería la primera actividad a realizar si queremos que el deporte cubano vuelva a ocupar el puesto que se merece y me refiero al análisis profundo del trabajo de los directivos y no cambiar a uno malo por otro peor, sino buscar a gente apta y con amor al deporte cubano, no solo a los viajes y a los incentivos o privilegios que traen consigo ese tipo de labores.
Hay muchas cosas que tienen que cambiar, y esas dependen de los directivos. Ningún país del mundo celebra su campeonato nacional de atletismo para decidir quién sale de gira y quién no. En todos los países se celebran para estas fechas para elegir a los que pueden ir al mundial u otro evento internacional. Sería posible en concordancia con los resultados del año anterior decidir quién puede ir a una gira o no y el Barrientos se pudiera celebraría más tarde. La fecha del Barrientos parece parte de una de las costumbres arcaicas que parecen sembradas en la cabeza de los directivos. Tampoco se debería permitir que las giras de fogueo sean vitalicias. Si un atleta no ofrece los resultados en la competición principal, pues se le debería dar la oportunidad a otro.
Tampoco me me parece ideal que si hay un atleta muy bueno en una disciplina, no se intente desarrollar con todas las de la ley a otros más jóvenes de esa disciplina.
Ya vimos como nos quedamos sin atleta de 110m c/v, también en los 400m femeninos, y en los 400 m c/v masculinos. Ahora en los 800m femeninos solo existe Almanza, llegando a los 30. En el decatlón se sigue trabajando principalmente con Leonel, en lugar de darle paso a otro atleta joven. Sí, es cierto que somos un país con limitados recursos, pero se sabe que si no se desarrolla a los posibles sucesores de los atletas de élite, cuando aquellos no estén por las razones que sean, empezarán de nuevo. El deporte es un trabajo de dedicación, sacrificio y esfuerzo, los atletas no pueden hacer vida normal de gente joven, pues si les damos por demás las razones para retirarse, entonces, ¿para qué empezamos a formarlos?