En Guadalajara, México, el 24 de octubre de 2011 Yarisley Silva destrozó los pronósticos y se coronó campeona panamericana, dejando atrás a la doble campeona mundial Fabiana Murer (BRA). Con ello se coló en la historia del deporte cubano como la primera medallista en la difícil disciplina de salto con pértiga. Esta joven, nacida en 1987, es tenaz y  cree en que los obstáculos nunca tienen el poder necesario  para apagar los sueños.

Llegó tarde al atletismo.  Tenía 15 años cuando su antiguo entrenador y su tía la indujeron a practicar una modalidad que admite, no haber conocido hasta ese momento:  “¿Salto con pértiga?, no tenía ni idea de lo que era, pero lo intenté  y me gustó”

Por nueve años Yarisley Silva ha estado en el equipo nacional junto a su profesor Navas.  Un tiempo que,  según sus propias palabras ha englobado;   “(…) años de sacrificio y dedicación.  Llenos de momentos difíciles, con dificultades técnicas e indecisiones que atentaron contra mis resultados”

Entre 2007-2008, Yarisley sufrió una lesión psicológica que le impedía despegar. Para que tengan una idea, cuando dice “despegar” se refiere a que una vez que realizaba la carrera de impulso no lograba elevarse  junto a su garrocha para buscar la altura.  Pero su carácter fuerte la catapultó a replantearse sus metas y se sobrepuso para conseguir, nuevamente,  los 4.50m necesarios para obtener el boleto a las principales competencias en el mundo.

Con la marca llegaron sus incursiones en el circuito internacional: Beijing,  temporada de invierno de 2011, Daegu y Guadalajara.

A sus 21 años acudió a la primera cita olímpica de su carrera: Beijing 2008. Allí, más allá de sus resultados cuantitativos -que no fueron los mejores- afirma que: “(…) ver de frente  y medirme con  las mejores del mundo  fue  sensacional, me motivó  mucho y me dije, yo puedo ser como ellas y lograr lo mismo que ellas”.

Del  vigesimoséptimo lugar cosechado en  Beijing  avanzó a una quinta posición  en  el Mundial de Daegu 2011, terminando  un escaño por delante de la plusmarquista rusa Yelena Isinbayeva: “(…) tener ese resultado superior al de la mejor del mundo es una motivación adicional para seguir superándome”. –comenta –

Después apareció Guadalajara  y firmó su gran éxito continental. Vencer a Fabiana Murer y concretar su excelente temporada con una nueva marca personal de 4.75m es algo de lo más importante que le ha pasado en la vida; lo dice con orgullo, pero no se le nota convencida de que es todo lo que pueda lograr. Ahora prepara su temporada de invierno  que incluye varias reuniones atléticas en Europa y un fin pactado para el Mundial bajo techo  de Estambul.

Entonces, piensa en lo siguiente que debe enfrentar. Piensa en Londres y mira al cielo antes de hablar de sus objetivos para la olimpiada, la segunda de su vida pero la primera a la que llega con registros que la sitúan con opciones de pelear por buscar un puesto fijo dentro de lo mejor de este deporte en el mundo.  “Mi objetivo en Londres es sobrepasar los 4.80m que me lo debo del panamericano. Buscaré estar entre las cinco mejores de la competencia.  Ahora, sí con esa marca que es la que pienso lograr allí puedo acceder a las medallas pues, nada, sería lo mejor. Yo me estoy preparando para hacer una buena competencia allí  y los pronósticos también dependen mucho de cómo evolucione mi temporada. “

 Es sencilla, amable y muy humilde. Ni siquiera nos comentó que la habían invitado a Donetsk a la competencia que auspicia el astro Sergei Bubka. Es una gala conocida como “Pole Vault Stars”; La gala de estrellas de la pértiga mundial donde anualmente acuden, por invitación, los mejores atletas de esa disciplina.

Esta también es una victoria para ella y para el deporte de nuestra pequeña isla.  Pero más allá de eso, lo cierto es que Yarisley Silva ya ha dejado de prometer para convertirse en una realidad. Es la recordista nacional y la primera- y única- medallista panamericana que tenemos en este deporte. Es la mejor pertiguista que tenemos hoy y la mejor que hemos tenido en todos los tiempos.

Tiene 25 años y los 4.75m que ha saltado la hacen parte de la selecta lista de solo ocho atletas que  a  esta edad han llegado a esa cota en la historia. Salió a la luz después de Daegu y con ello comienza a escribir  una carrera interesante. Para muchos de los más entendidos esta chica, de Pinar del Río y de Cuba, se perfila apta para protagonizar el nacimiento de una nueva estrella en la pértiga mundial.

Y es como la luz de un faro,  que guía; de hecho a su lado ya se preparan otras dos muchachas  (Dailis Caballeros y Susana Galloso), ambas con sueños y aspiraciones sustentadas en su compañera de diarias batallas. Sustentadas en Yarisley Silva, esa pequeña cubana que sin hacer caso a su 1.63m de altura ya se ha encumbrado por encima de las más grandes para mezclarse entre las de mejores resultados en el mundo.