Birmingham La Ericsson Globe Arena, majestuosa según cuentan, se ha asegurado de trascender como cuna de acontecimientos históricos para el salto con pértiga. Hitos que marcan al universo y a nuestra pequeña isla.

En 2012, Estocolmo fue testigo de la resurrección de una reina gracias al 5.01 que aun rige las competiciones bajo techo (indoor), en su condición de récord mundial. Lo hizo la única que hasta hoy sabe lo que se siente al cruzar su anatomía, toda, por sobre los 5 m (en realidad, la única que ha ido de 4.93 en adelante), Yelena Isinbayeva, en la jornada del 23 de febrero, donde Yarisley Silva, nuestra pertiguista de cabecera, fue su escolta en el podio y puso límite –momentáneo- de 4.72m para la garrocha femenina cubana en este tipo de escenario.

Hoy, dos días antes de que las emociones ligadas a concretar, presenciar e incluso auspiciar una competencia donde cae un récord mundial lleguen su primer año de vida, dicho escenario acogió una -otra- estupenda lid que terminó por refrendar a la nueva líder del escalafón de la actual temporada.

Yarisley Silva encaramó a Cuba en la cima del listado de registros en el salto con garrocha de 2013, merced al salto ganador de 4.78m en la XL Galan, esta tarde. Marca hecha en su primer intento y con la cuál escala un nuevo peldaño en el rendimiento deportivo de su carrera. Cuatrocientos setenta y ocho centímetros que suponen, además, récord absoluto para nuestro país y para el Área de Centroamérica y el Caribe (CAC).

¿Su concurso?

Interesante y desenfadado; rasgos distintivos en sus incursiones de 2013. Comenzó en 4.45 y lo consiguió a la primera. Luego “pasó” de 4.55 para hacerse del 4.64 en su segundo intento. Altura tras la cual, solo la checa Jirina Svobodová-Ptácníková , la rusa Anastasya Shavchenko y ella, quedaban con vida.

Su siguiente movimiento, arriesgado si se quiere, muestra la seguridad de la que se ha acompañar la discípula de Alexander Navas desde Londres. Renunció a 4.71, obediente ante el objetivo confeso de economizar, para jugárselas todas con el 4.78; una altura nunca antes conseguida de manera oficial.

Svobodová-Ptácníková quedó en 4.64 (su mejor marca de la temporada) y Shavchenko, pasó a comandar la prueba tras saltar limpiamente sobre el 4.71. Lo que viene después ha sido la noticia; Yarisley Silva superó sin problemas el 4.78 y con ello sumó otra altura a decoración numérica de su -ya prodiga- carrera.

Según la página web de la reunión, Anastasya Shavchenko no continuó en competencia pues en la secuencia publicada no se da cuenta de otros intentos sobre alturas superiores. La atleta rusa, líder del ranking de su país, es , ante la ausencia del legendario dueto Isinbayeva – Feofanova, quien encabeza la especialidad dentro de la armada rusa que llegará a Gotemburgo con la misión de mantener la hegemonía en el continente, ratificada en Paris dos años atrás. De Savchenko les cuento que viene rindiendo una actuación correcta. En lo personal, ha roto sus registros en cuatro de sus incursiones invernales; el 4.71 de esta noche no fue excepción.

Yarisley, en tanto, tuvo tres intentos sobre 4.81, sin concretar.

Anna Rogowska y Holly Bleasdale, a priori consideradas entre las principales animadoras de la jornada, quedaron por debajo de las expectativas y de lo que ellas como atletas son capaces de rendir.

La polaca se fue sin marcas y Bleasdale, después de un inicio impecable sobre 4.45, se enredó con el 4.64 y terminó compartiendo la cuarta posición con la finlandesa Minna Nikkanen. Así, el duelo Bleasdale vs. Silva, proyectado como atractivo en varias de las citas que animaron este circuito helado concluyó con empate a dos victorias. Bleasdale se llevó a casa el título en Moscú (4,75) y Birmingham (4,70) mientras que Silva cargó con todos los méritos en Bydgoszcz (4.60) y Estocolmo (4.78) .

La británica, sensación de 2012 gracias a aquel 4.87 que estremeció al mundo en enero, es probablemente la mayor promesa de la especialidad. Esta chica, con carencias técnicas evidentes, pero favorecida enormemente por su corta edad (21 años cumplidos) y dado el potencial acreditado con varias incursiones que transgreden la barrera de los 4.75m, exhibe contundentes razones como para llegar a triunfar en su candidatura hacia la cúspide de la compleja disciplina. Físicamente es muy fuerte, anda aun lejos de lo que puede llamarse el prototipo “ideal” de una atleta dedicada a esta modalidad y aun así, coexiste en la élite. Y si parece poco, su presencia en el mundillo de la garrocha, cobró alguna que otra valoración halagüeña sobre sus condiciones y perspectivas de boca de Isinbayeva; Algo que visto a través de los resultados de la dueña de la palabras, bien pudiera ameritar calificativos de profecía.

Gala XL y un tantico más allá

De regreso a Yarisley Silva, me resta apuntar que lo hecho en Suecia es el justo colofón para una temporada exitosa. En poco menos de un mes, la cubanita enfrentó seis competiciones y en todas inscribió su nombre en el podio, con cuatro primeros lugares incluidos.

Su record nacional, el patentado hoy en la Gala XL, supera en dos centímetros el registro precedente. De su autoría, fijado en la altura de 4.76m y rubricado en Donestk el pasado día 9.

La marca, aunque encanta, no sorprende. Se veía venir. Inesperado, y hasta fatídico a plano personal, habría sido que no concretara un resultado de esta magnitud luego de cumplir una secuencia de presentaciones con la estabilidad proyectada.

Para los más exigentes, el registro no supone “demasiado” en medio de una élite convocada a superar los 4.80 o más. Razón lógica, el aire y las pésimas condiciones de Londres no deben repetirse, y en ausencia de estos factores adversos, nadie duda que para las medallas en Moscú sea necesario recurrir a alturas superiores. Pero más allá de los análisis de tendencia en los resultados que han marcado y deben regir a esta disciplina, hay una realidad que bien puede condicionar la dinámica. Hoy no hay una atleta que domine a placer, con Yelena fuera de sus cabales, “todas las que son”, están al mismo nivel y aunque parezca que Jennifer Suhr se robar la arrancada, está demostrado que a la “hora de los mameyes” todo mundo no sabe ponerse los pantalones… Yarisley Silva sí; Guadalajara y Londres perpetraron su estirpe: reina en momentos difíciles; princesa de las alturas.

En cuanto a las marcas, a penas es invierno, el sol calienta las pistas y las varillas tienden a subir. Por ahora hay algo cierto, el cierre invernal de Yarisley Silva deja la mesa servida para un verano que promete; para un Moscú que se promete y, ¿por qué no? , también para un 2014 donde el “indoor” y su mundial serán objetivos claves.

Para comparar y vaticinar sobrará tiempo,  por hoy  se vale celebrar. La primera meta de todos los grandes campeones siempre ha sido la de auto superarse, y en este tema, amigos, Yarisley Silva acaba de sumar unos cuantos créditos para su doctorado.