Por Eddy Luis Nápoles Cardoso

Continuando con las valoraciones sobre lo expresado a lo largo de los años por las atletas cubanas, lo haremos en el salto de longitud, prueba que ha conquistado algunos éxitos internacionales, incluidas, dos medallas de plata, una en el mundial de Gotemburgo 1995 y la otra, en la Copa del Mundo de Londres 1994, ambas a la cuenta de Niurka Montalvo, posteriormente nacionalizada española. Estas conquistas tuvieron el embrión en la capitalina Bertha Díaz, ganadora del título en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, Kingston 1962.

El primer récord nacional en salto de longitud, aparece registrado, como los 3.76 metros, logrado por Poupúe Puig, el 16 de junio de 1933. Carmen Leira, con 4.30, fue la primera en superar los 4.00 metros (La Habana, 26 de junio de 1934); la capitalina Haydée Claver, saltó 5.32 (La Habana, 4 de agosto de 1956), primera en hacerlo sobre los 5.00 metros, mientras que la cienfueguera Irene Martínez, saltaba 6.07, en La Habana, el 30 de abril de 1966. El actual récord cubano está acreditado en 6.99, en poder de la capitalina Lissette Cuza, impuesto, el 3 de junio de 2000, en Jena, Alemania.

Las mejores ubicaciones anuales en el listado mundial han estado a cargo de Ana Bella Alexander, cuarta en 1975 (6.63), Marcía Garbey, quinta en 1975 (6.62); Lissette Cuza, quinta en 2000 (6.99), Yargeris Savigne, quinta en 2010 (6.91) y Niurka Montalvo, séptima en 1998 (6.93) y décima en 1995 (6.89).

El mapa cubano del salto de longitud, atendiendo a las 30 primeras atletas del ranking nacional, hasta 6.33, tiene la particularidad de incluir a 10 atletas que se dedicaron al heptathlon y estaría conformado por La Habana (8), seguida de Santiago de Cuba (5), Matanzas (4), luego aparecen Camagüey y Guantánamo (3), Pinar del Río, Las Tunas (2), cerrando Villa Clara, Cienfuegos y Artemisa (1).

Ahora para valorar los rendimientos de las saltadoras de longitud cubanas, tomamos como muestra, lo realizado por las 20 mejores exponentes de esta prueba, comparándolo a su vez, con sus similares del mundo. Entre los aspectos a juzgar están; la edad de inicio en la prueba, edad del logro del mejor resultado, rango de edades para el logro de los rendimientos estables, los índices de crecimiento y decrecimiento anual, así como el crecimiento y decrecimiento total. También se puede apreciar, la talla y el peso ideal para esta especialidad.

En la muestra nacional analizada, emerge como edad inicial en la prueba, los 14 años, algo lógico y natural, debido al sistema de participación deportiva cubano, mientras que el promedio de edad en la muestra del mundo, es tres años mayor (17 años). Lissette Cuza, patrón cubano de la prueba (6.99), inició sus resultados cuantificables a los 15 años, con 5.83 metros.
Entrando en detalles poco conocidos sobre las saltadoras de longitud cubanas, tenemos que, generalmente logran sus mejores rendimientos a los 22 años (6.60), mientras que sus homólogas del mundo, lo hacen a los 26 años (7.06). El rango de edades donde se manifiestan los mejores rendimientos, en Cuba está enmarcado entre los 20 y los 26 años; las mejores del mundo, lo hacen durante un período más prolongado, de los 20 a los 33 años.

Las atletas criollas en esta prueba generan un índice de crecimiento anual promedio de 0.12 centímetros (incremento que pueden lograr de una temporada a otra), la muestra de las mejores del mundo, incrementan 0.11 centímetros. Las criollas alcanzan un crecimiento total, desde el inicio de su carrera deportiva, hasta el logro del mejor resultado (6.60), de 0.85 centímetros; por 0.72 centímetros las foráneas. Entre las atletas cubanas, el mayor crecimiento se produce, entre los 14 y 15 años, con 0.31 centímetros, mientras que, el mayor decrecimiento está ubicado, entre los 29 y 30 años, con 0.28 centímetros.

El decrecimiento total para las cubanas, es decir, la pérdida de rendimiento partiendo, entre la mejor marca (6.60) y el final de la carrera deportiva (5.96), es de 0.64 centímetro, mientras que las mejores del mundo, con un rendimiento óptimo hasta los 35 años (6.79), ceden 0.32 centímetros. El índice de decrecimiento anual, entre las 20 mejores saltadoras de longitud cubanas, es de 0.06 centímetros, mientras sus homólogas del mundo, ceden 0.07 centímetros.

Analizando las 30 primeras saltadoras de longitud cubanas, tenemos que lograron como promedio, su mejor resultado histórico en el mes de mayo. En esta prueba, con destaque internacional, el 47%, 14 atletas, hicieron su mejor marca compitiendo en el extranjero.

En los parámetros de talla-peso, la atleta cubana de salto de longitud, ha presentado una talla promedio de 1.71 metros, con un peso promedio de 62 kilogramos, cediendo en talla (4 cm), a las mejores del mundo (1.75). Atletas como Yilian Durruthy (1.76 y 77) y Olga Lidia Cepero (1.77 y 66), cumplimentaron los estándares de talla y peso expresado por las mejores del mundo.

Actualmente la prueba se encuentra en el ocaso, dentro del atletismo cubano, donde solo la heptalonista Adriana Rodríguez es capaz de lograr saltos estables sobre los 6.40m, en tanto Yanisley Carrión aparece con 6.28m de marca personal.

Patrones por edades en el salto de longitud, en Cuba