quisqueç Por Andy Bermellón Campos

De histórica se puede catalogar la victoria de los dominicanos, ayer en el Marlins Stadium de la Florida, ante el poderoso equipo estadounidense. Los quisqueyanos vinieron de abajo en el marcador para derrotar a uno de los favoritos de este torneo, con los hits de oro del emergente Erick Aybar y el torpedero José Reyes, logrando así su pase a la semifinal de los Clásicos Mundiales por segunda vez y superando la actuación del 2009, donde fueron eliminados en primera ronda, por los ya clasificados holandeses.

En un juego cerrado de principio a fin- por mucho la mejor actuación de ambas escuadras en el esta edición – con dominio de los lanzadores, excelentes defensa y estrategias de juego y oportuna ofensiva a la hora cero y conservar el invicto en sus cinco presentaciones en esta edición.

Joe Torre, echó mano al Cy Young 2012, R.A. Dickey, quien esta vez, se presentó en noche de gala, al soportar solo cinco hits en igual números de entradas. Permitiendo una sola carrera, salida del madero del antesalista Haley Ramírez, por cuadrangular en el segundo capítulo, que marcó la igualdad en el partido. Mientras que los dominicanos dependieron de los servicios del diestro Samuel Deduno, quien fue un digno rival, al reponerse de una primera entrada adversa y propinar siete ponches a la fuerte batería norteña, en cuatro entradas, con solo dos boletos y cinco indiscutibles. Dejando la definición del encuentro en manos de los relevistas.

En el noveno episodio, los norteños dependían del máximo salvador en la temporada 2012 en las Grandes Ligas, el diestro Craig Krimbell, quien soportó doblete de Nelson Cruz abriendo la entrada, el cual avanzó a tercera, por rolling a segunda del receptor Carlos Santana. Erick Aybar salió de emergente por Ricardo Nanita y pegó hit impulsador hacia el jardín derecho y luego estafó la segunda y anotó por indiscutible impulsador del torpedero José Reyes. Mientras que el cerrador Fernando Rodney aseguraba el partido, tras realizar un cierre perfecto, demostrando que es un verdadero especialista en juegos salvados, en las Grandes Ligas. Ahora los norteños, se juegan esta noche, el pase a su segunda semifinal del certamen ante los combativos boricuas, los cuales cayeron en el primer partido de este grupo ante los norteamericanos, siete anotaciones por una. Los chicos de Joe Torre, salen como favoritos ante los puertorriqueños, que solo batean para 234 y solo han impulsado 15 carreras, por lo que no debe ser un escollo difícil para el cuerpo de serpentineros norteamericanos que lanzan para tres limpias por juegos, con solo diez transferencias en cuarenta y cinco entradas de labor.

A pocos días, para que el III Clásico, entre en su fase final, con tres semifinalistas asegurados, en espera del ganador del partido de esta noche, donde saldrá el último boleto para San Francisco. Los nipones-campeones de las versiones de 2006 y 2009- salen con etiqueta de favorito, para incluirse en la gran final, los cuales batearon para 294 de average ofensivo y 3,98 la efectividad de sus lanzadores, en las dos rondas clasificatorias, aunque las selecciones de Estados Unidos y República Dominicana tienen buenos elencos y tienen grandes posibilidades de discutir el cetro del campeonato.

Los primeros con un average ofensivo de 283 y veinticuatro carreras impulsadas, mientras que los quisqueyanos batean para 306, con veintisiete remolques y seis cuadrangulares y su cuerpo de serpentineros lanzan para 2,60, el mejor entre los cinco equipos que quedan con posibilidades en el campeonato, mejorando la actuación de la edición pasada, siendo el único equipo invicto del torneo y goza de un espíritu de juego acoplado y unido desde el primer día, lo que lo hace un equipo con grandes posibilidades de discutir el cetro. Mientras los sorpresivos holandés es el equipo sorpresa- unas de las tantas en este III WCB- cuentan con una pobre ofensiva y un elevado promedio de pitcheo y por mucho es el equipo de menos posibilidades entre los semifinalistas, pero ha demostrado ser un equipo con mucho oficio y nivel en todos los aspectos de juego, por lo que es muy difícil pronosticar quienes serán los finalistas. Solo nos queda esperar, a que este domingo, la voz a jugar llegue a San Francisco, para saber quiénes disputaran la corona de este III Clásico Mundial de Beisbol.