Por: Eddy Nápoles/ Exclusivo

El ugandés Joshua Kiprui Cheptegei ha implantado un nuevo récord mundial en los 5 mil metros, con 12:35.36, pasando a mejor vida los 12:37.35 del etíope Kenenisa Bekele, que permanecieron inamovibles por 16 años, dos meses y 15 días (Hengelo, 31 de mayo de 2004). Este es el tope número 35 en un listado que inició el británico Arthur “Archie” Robertson, con 15:01.2 en Estocolmo, el 13 de septiembre de 1908.

Joshua Cheptegei estampó récord del mundo para la prueba de 5000 m planos, deteniendo los relojes en 12:35.36 minutos, para dejar atrás el crono de 12:37.35 que desde hace 16 años estaba en poder del fantástico Kenenisa Bekele.

Según refiere el reporte en la Web oficial de la World Athletics, la carrera de Cheptegei estuvo caracterizada por un ritmo tan feroz que para la mitad de la ruta ya había doblegado a todas las liebres.

La proeza del ugandés fue celebrada por el escaso público al que se le permitió asistir a la reunión, el cual, inusualmente distanciado pero feliz, celebró la nueva genialidad del campeón mundial de los 10 000 metros en Doha 2019.

Lilian Cid en Cubahora

Cheptegei es el segundo atleta ugandés que aparece en la tabla de récords mundiales, el primero fue John Aki-Bua con 47.82 en los 400 con vallas, en Münich 1972. Joshua lo hace en una prueba, que en los últimos 35 años, ha estado dominada por corredores africanos, marroquíes, kenyanos y etíopes, por ese orden.

¿Quién es Joshua Kiprui Cheptegei ?

Veamos quien es Joshua Kiprui Cheptegei, nació el 12 de septiembre de 1996, en el poblado de Kapsewui, perteneciente al Distrito de Kapchorwa, situado al este de Uganda y distante, unos 295 kilómetros de Kampala, la capital. Los inicios fueron en el fútbol, pero luego fue absorbido por el atletismo. Su hoja de ruta presenta los mejores performances en los 10 mil metros, iniciando con el título en el Campeonato Mundial Juvenil de Eugene 2014, al año siguiente fue noveno en el mundial de Beijing, mejoró tres puestos en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, escoltó a Mo Farah en el mundial de Londres y ganó el título en la cita de Doha 2019. En cambio, los 5 mil, donde acaba de estampar el mejor registro del mundo, no parecían ser su mejor prueba, solo había sido, titular de la Commowealth en Gold Coast 2018, el cuarto junior en Eugene 2014 y octavo en Río de Janeiro.

En la pasada temporada, Cheptegei realizó sus mejores marcas, en los 10 mil metros, logró correr en Doha, 28:48.36 minutos, una marca superior a los 12:57.41, que logró en los 5 mil metros, en Zürich, pero es que el ugandés venía conjugando de manera excelente los registros en las tres superficies (pista, carretera y tierra). En carretera, realizó en Nijmegen (2018) 41:08, en 15 km, en Valencia (2019), hizo 26:38 en 10 kilómetros, mientras que en febrero pasado, en Mónaco había corrido los 5 kilómetros, en 12:51 y a campo traviesa, el pasado año, ganó el mundial de Aarhus.

Con este récord del mundo en los 5 mil metros, Cheptegei, le troncha la posibilidad al etíope Kenenisa Bekele, de erigirse como el amo de las tres plusmarcas mundiales en las pruebas de fondo, Bekele poseía, la de 5000, con 12:37.35, posee la de 10000, con 26:17.53 y el pasado año dio una clarinada, cuando corrió la maratón de Berlín, en 2:01:41 horas, a solo dos segundos de las 2:01:39 del kenyano Eliud Kipchoge.

Otro aspecto que pudiera sorprender, es el hecho que Cheptegei, haya logrado este récord mundial en una temporada totalmente atípica, pues la pandemia del Covid-19, ha obligado a paralizar, no solo, las competencias atléticas, sino, prácticamente, todas las actividades sociales. En esto, destaca la entrega y voluntad de Joshua Cheptegei por mejorar sus rendimientos, que lo llevó, en unión de patrocinadores, a construir una pista sintética en su pueblo natal, lo cual, en estos tiempos de aislamiento, le debe haber beneficiado.

Ahora, solo queda esperar que Cheptegei, próximo a cumplir los 24 años (12 de septiembre), pueda hacerse con el tope mundial de los 10 mil metros, aunque distante de esos 26:17.53, para este ugandés parecen no existir obstáculos infranqueables, lo está demostrando.