por: Dr. José Ramón Fabelo Corzo/ *Exclusivo

Como es conocido, el atletismo encabeza el listado de deportistas cubanos clasificados para los Juegos Olímpicos de Tokio en el próximo verano. Hasta este momento son 14 los atletas que ya tienen su boleto por el método más directo y seguro: haber realizado la marca mínima en el período clasificatorio previsto. Son ellos 7 hombres y 7 mujeres.

Todos los hombres que han logrado sus marcas lo han hecho en el área de saltos: Luis Zayas en altura; Juan Miguel Echeverría, Lester A. Lescay y Maykel D. Massó en largo; Cristian A. Nápoles, Andy Díaz y Jordan Díaz en triple. Las mujeres que ya tienen su presencia segura en la capital nipona son dos corredoras (Rome Mary Almanza en 800 m y Zurian Hechavarría en 400 m/v), tres saltadoras (Yarisley Silva en pértiga, Liadagmis Povea y Davisleydi Velazco en triple) y dos lanzadoras de disco (las estelares Yaimé Pérez y Denia Caballero).

Pero hay otros atletas que pueden sumarse a esa delegación y no sólo consiguiendo la marca mínima que, de por sí, es muy exigente en todos los casos. Precisamente, por ser marcas difíciles de conseguir, la World Athletics establece una segunda posibilidad de clasificación. Para alcanzar la cifra de participantes que se establece previamente para cada prueba se cubren las plazas vacantes con los atletas no clasificados por marcas que mejor ubicados se encuentren en el ranking mundial, con la condición adicional de que no haya más de tres atletas de un mismo país.

En este momento, al finalizar el mes de marzo de 2021, hay un total de 4 atletas cubanos en pruebas individuales y una cuarteta de relevo que estarían clasificando a las Olimpiadas si hoy mismo cerrara el período clasificatorio. Pero como este no cierra hasta el 29 de junio y el ranking es dinámico y varía de semana en semana, es necesario elaborar una estrategia acertada para que estos atletas se ratifiquen o mejoren su lugar actual en el ranking en los tres meses restantes y finalmente clasifiquen a los Juegos Olímpicos. Igualmente hay otros que no tienen la marca ni están entre los clasificables por ranking en este momento, pero que pueden lograr lo uno o lo otro y se debe tratar de hacerles el camino lo más expedito posible para que puedan conseguirlo.
Veamos, primero, los hoy mismo clasificables:

Tomando en consideración los ya clasificados por marca y descontando aquellos que sobrepasan los tres participantes permitidos por país, el velocista Reynier Mena ocupa el lugar 47 en la prueba de 200 metros planos de un total de 56 que participarán en Tokio en esta prueba. Por lo que podría ceder todavía 9 lugares ante otros atletas que hagan la marca o lo superen en ranking y aun así clasificaría. Me explico mejor. En esta prueba, hasta ahora, han clasificado con la marca mínima de 20.24 un total de 27 atletas. La mejor marca de Mena en el período es de 20.37. No le alcanza para clasificar por marca, pero como la cantidad de atletas que participarán en la prueba han de ser 56, un total de 29 lo estarían haciendo por su lugar en el ranking. Entre ellos Mena, con 1159 puntos, es el vigésimo mejor rankeado, por lo que clasificaría en el lugar 47 en general.

Para mantenerse y asegurar la clasificación, lo más conveniente es que Mena –lo mismo que otros con posibilidades de clasificar por ranking– compitan lo más posible en sus respectivas pruebas a nivel internacional. Y decimos a nivel internacional porque las pruebas domésticas como las de confrontación, si bien muy importantes en la preparación de nuestros atletas, no aportan muchos puntos adicionales al ranking, más allá de los que de por sí presupone la marca. Y aquí es bueno hacer un paréntesis. El puntaje del ranking para la mayoría de las pruebas es el resultado del promedio de los cinco mejores resultados obtenidos por el atleta en un período que normalmente es el del último año, pero que, en este caso, por la pandemia, abarca dos años para la mayoría de las pruebas, desde el 30 de junio de 2019 hasta el 29 de junio de 2021. Cada uno de esos resultados da una cantidad de puntos de acuerdo a la marca registrada, pero puede dar una cantidad de puntos adicionales, en dependencia del rango de la competencia misma en que la marca se logra.

En el caso de Mena, por ejemplo, el resultado que más puntos le ha dado para el ranking no fue aquel en que hizo la mejor marca (el ya mencionado 20.37), sino el 20.62 con el que obtuvo el 5to lugar en los Panamericanos de Lima. La marca de 20.37 por sí misma le dio 1162 puntos. Al obtener con ella el primer lugar en la Competencia Especial de marzo de 2020 en el Estadio Panamericano de La Habana, ello le adicionó 15 puntos, para un total de 1177 puntos. El resultado en Lima le dio 1130 puntos por la marca, pero 90 puntos adicionales por ocupar el 5to puesto en unos Juegos Panamericanos, para un total de 1220 puntos. Es por eso que para los atletas con posibilidades de clasificación por ranking es importante participar en competencias internacionales que premien mejor, con puntos adicionales, las marcas que se obtengan.

Otro atleta que hoy mismo estaría clasificando por ranking es el veterano discóbolo Jorge Fernandez. En su prueba competirán 32 en Tokio, hay 19 con la marca de 66 metros, por lo que estarían entrando 13 por el ranking. Entre ellos Jorge es el 9no con 1160 puntos, ocupando el lugar 28 en general.

En los 400 metros planos femeninos nuestra principal figura, Roxana Gómez, estaría clasificando con 1174 puntos hoy en el lugar 46 entre los 48 que competirán.

Adriana Rodríguez, en el hepthatlon, evento múltiple femenino en el que sólo 9 atletas han logrado hasta este momento la exigente marca clasificatoria de 6420, estaría clasificando hoy en el puesto 18 entre las 24 que concursarían en la competencia olímpica.

Valdría la pena que todos estos atletas pudieran insertarse en la tradicional gira de verano y que participen, en la medida de lo posible, en competencias de elevado rango. También es muy conveniente que se realice en Cuba, en el período clasificatorio, antes del 29 de junio, una Copa Cuba o un campeonato nacional ya que una competencia de ese rango otorgaría hasta 80 puntos adicionales en el ranking a sus ganadores, algo que no se consigue en una confrontación o en una competencia especial, como la que el año pasado, debido a la pandemia, sustituyó a la Copa Cuba. No importa en este sentido que en algunas pruebas de las confrontaciones domésticas estén participando atletas de primer nivel, como en el disco femenino con Yaimé y Denia, campeona y subcampeona mundiales vigentes. Así y todo, a la ganadora se le da sólo 15 puntos adicionales, a la segunda 10 y a la tercera 5.

Por último, la cuarteta cubana femenina de 4 x 400 metros sería el otro clasificado por Cuba si hoy mismo cerrara el período clasificatorio. Hay que señalar que el sistema de clasificación de los relevos para Tokio 2020 es diferente. Competirán en total 16 equipos, máximo uno por cada país. Los primeros 8, ya clasificados, son los finalistas del Mundial de Doha de 2019. Así estaba previsto para una Olimpiadas que debieron celebrarse en el verano de 2020. Esos clasificados se mantienen, aun cuando los Juegos Olímpicos se hayan pospuesto un año. En el caso del 4 x 4 femenino, los ya clasificados son Estados Unidos, Polonia, Jamaica, Gran Bretaña, Bélgica, Ucrania, Holanda y Canadá. Los otros 8 equipos que participarán en los Juegos Olímpicos se tomarán de las mejores marcas logradas entre el 1 de enero de 2019 y el 29 de junio de 2021. Entre ellos, Cuba tiene hasta ahora la 6ta mejor marca, 3:29.84, lograda en la semifinal del propio Mundial de Doha. Con esa marca la cuarteta cubana estaría entrando como el equipo número 14 clasificado entre los 16 que participarían.

Al respecto, se precisa una aclaración. Recientemente se ha informado que la cuarteta femenina cubana de 4 x 4 intervendrá en el Mundial de Relevos de Silesia, Polonia, el 1ro y 2 de mayo próximos. Ello es muy bueno de cara a los Juegos Olímpicos, por supuesto, pero no porque el resultado pueda dar la clasificación directa a Tokio, sino, en todo caso, porque de mejorar el resultado de 3:29.84, podría el equipo cubano afianzarse entre los 8 equipos que clasificarán por los mejores tiempos. También es importante porque esa promisoria cuarteta se probará a sí misma compitiendo con los mejores equipos del mundo y porque, además, de quedar ubicada entre las 10 primeras, obtendrá –eso sí– la clasificación directa para el Campeonato Mundial de Oregón 2022.

Si se lograra concretar la clasificación de estos atletas y del equipo femenino 4 x 4, llegaría Cuba a tener 18 atletas en competencias individuales a lo que se sumarían las 2 atletas del relevo que no estarían clasificadas en eventos individuales. Sería 20 los representantes del atletismo de la mayor de las Antillas en Tokio 2020.

Pero podrían haber más. Además de los atletas y equipo arriba mencionados que tienen más cercana la posibilidad de clasificarse por ranking y en cuyos casos la estrategia consistiría en que mantengan o mejoren su lugar en el mismo (sin descontar la posibilidad de que algunos de ellos alcancen la marca mínima), hay otros atletas con posibilidades reales de clasificar, aunque aún no tengan la marca ni estén entre hoy los clasificables por ranking. Veamos sus casos.

La más cercana a esta meta es la joven Silinda Morales, convertida en nuestra tercera mejor discóbola, capaz de lanzar ya el implemento más allá de los 63 metros. En estos momentos ella está con 1080 puntos en el lugar 33 y serán 32 las participantes en su especialidad. Está muy cerca, a sólo un puesto. Otras que están ahora por encima en el ranking no han lanzado tan lejos como ella, pero lo han hecho en competencias que dan más puntos adicionales. Esta es una atleta que necesita mucho competir internacionalmente. Lo más importante lo tiene: su capacidad de enviar el disco bien lejos.

La juvenil y talentosa triplista Leyanis Pérez ha saltado ya 4 veces por encima de los 14 metros, tres de ellas este año. Su mayor y más reciente salto fue de 14.26, a sólo 6 centímetros de la marca clasificatoria (14.32). En su caso, parece estar más cerca esa marca que la posibilidad de que acceda a los juegos olímpicos por ranking. En estos momentos hay ya 25 atletas que han conseguido la marca de clasificación. Sólo hay lugar para 7 atletas más. Leyanis ocupa el lugar 20 por ranking entre las no clasificadas y el 45 en el listado general de clasificables (por marca y ranking) y sólo participarán 32 en su prueba. Sus marcas, si bien muy buenas, han sido conseguidas todas en competencias domésticas y ellas le han dado muy pocos puntos adicionales para el ranking. En su caso lo más recomendable parece ser que compita mucho para que tenga más posibilidades de alcanzar la marca y que también lo haga en alguna competencia internacional del área.

Yorgelis Rodríguez, debido a su operación, primero, y al largo proceso de recuperación, después, no ha podido realizar un hepthatlon completo ni en 2019, ni en 2020, ni en lo que llevamos de 2021. Por su calidad, se espera que pueda alcanzar su clasificación olímpica, sea porque logre la muy elevada marca clasificatoria de 6420, o porque consiga acceder por ranking. Para esto último es imprescindible que la atleta participe (y las concluya) al menos en dos competencias antes de que finalice el periodo clasificatorio. Apostar a una sola competencia para su caso es riesgoso y la obligaría a superar en ella los 6420 puntos. Debido a que el mínimo de pruebas para puntear en el ranking del hepthatlon es de dos, completar dos veces la prueba combinada multiplicaría por tres sus posibilidades de clasificación: que alcance la marca en la primera, que la alcance en la segunda, que obtenga como resultado de ambas pruebas un lugar en el ranking que la clasifique. De más está señalar que, de preferencia, al menos una de esas pruebas debería ser internacional, como la 34th Multistars de Lana, Italia, el 24 y 25 de abril, o el tradicional Hypo-Meeting de Götzis, Austria, a celebrarse este año el 29 y 30 de mayo.

En relación con el resto de los atletas, hay que admitir que otros pudieran clasificar, pero fundamentalmente logrando la marca clasificatoria, por haberla conseguido ya en otro momento o por haber estado cerca de ella, porque es difícil que lo consigan por ranking ya que se encuentran demasiado lejos de los hoy clasificables. En este grupo tenemos a Roberto Skyers (9.98) y el propio Reynier Mena (10.04) en 100 metros, que ya han realizado marcas mejores al 10.05 clasificatorio. Están también Roger Iribarne (13.39) y Yordan O’Farrill (13.19) en 110 m/v, a los que no parece inaccesible la mínima de 13.32, si bien hace tiempo que no se acercan a ella. Están también Sahily Diago (1:57.74) a la que le es asequible la marca de clasificación de 1:59.50, aunque su mejor marca de este año está algo distante (2:01.10).

Y tenemos por último al relevo 4 x 100 masculino. Este último tiene en contra el hecho de que debe hacer la marca en una competencia donde haya equipos de otras naciones y que no participará en el próximo mundial de relevos por no haber clasificado para el mismo. En estos momentos la marca que pone límite a los clasificables es de 38.59, en poder de Nigeria. Con esta marga el país africano va ocupando de momento el lugar general 16 entre los clasificados y clasificables. Tendría el equipo cubano que hacer una mejor marca en una competencia internacional. Además, esa marca límite podría cambiar en los meses que quedan, sobre todo por los resultados del Mundial de Relevos. El reto es difícil, aunque no imposible.

Cerrando este trabajo, ponemos a disposición del lector una tabla estadística en la que pueden constatarse muchos de los datos que nos han servido para el análisis que acabamos de exponer.