Por Eddy Luis Nápoles
En los 100 metros para damas y como para no variar lo que ha sido tendencia en estas distancias rápidas en los últimos tiempos en el mundo, se impuso la favorita jamaicana Dina Asher-Smith (11.23), con la ecuatoriana Angela Tenorio (11.39), como medallista de plata y la venezolana Andrea Purica, octava, la mexicana Cecilia Tamayo y la brasileña Vitoria Cristina Rosa, se ubicaban en semifinales.
En los 1500 metros, Etiopía logró el uno, dos, con Dawit Seyaum y Gudaf Tsegay, mientras que los 3000 metros eran para la local Mary Cain, quien con 8:58.48 minutos dominaba a la tribu africana.
Etiopía volvía a la carga en los 5000 metros, con Alemitu Haroye y Alemitu Hawi, mientras que los 3 mil con obstáculos eran para Bahrein, con Ruth Chebet (9:36.74), dominando los dúos de Kenya y Etiopía.
La estadounidense Kendell Williams, se impuso en los 100 mc/v, con crono de 12.89, dejando la plata para su paisana Dior Hall (12.92), mientras que la holandesa Nadine Visser, lograba su segunda medalla de bronce, esta con 12.99 segundos.
Shamier Little, de los Estados Unidos, se impuso en los 400 c/v, con crono de 55.66 segundos, mientras que la cubana Zurian Hechavarría, lograba un merecido cuarto lugar con récord nacional juvenil de 56.89 segundos.
En el salto de altura, la fenomenal Morgan Lake logró su segundo título, al vencer ahora con 1.93 metros, mientras la cubana Daniellys Dutil, era décima con apenas 1.78 metros. En la pértiga se imponía la rusa Alayna Lutkovskaya, con 4.50 metros mientras que en el salto de longitud, la barbadense Akela Jones, triunfó con 6.34 metros, la cuota más baja de todos los eventos precedentes, aquí la venezolana Genesi Romero, era décima con 5.88 metros. Cabe resaltar que Rusia, quizás aupado por el espíritu vanguardista de sus ases: Svetlana Feofanova y Yelena Isinbayeva, ha sacado a la luz una generación de jóvenes pertiguistas que va desde Anastasia Savchenko y Sidorova hasta esta niña, Lutkovskaya , que acaba de ganar el mundial juvenil; vestigios de grandeza en una especialidad que han dominado, prácticamente, desde su surgimiento.
En el lanzamiento del disco, la brasileña Izabela da Silva, conquistó el título mundial con envío de 58.03 metros, (RNJ), dejando a la saga a estadounidense y europeas. En el lanzamiento del martillo, se impuso la ucraniana Alyona Shamotina, con 66.05 metros, aquí una curiosidad, las doce finalistas eran europeas.
En el lanzamiento de la jabalina, el triunfo fue para la rusa Yekaterina Starygina, con 56.85 metros, mientras la brasileña Edivania Araujo, era décima con 49.84 metros. En la caminata de 10 mil metros, la checha Anežka Drahotová, logró récord mundial, con 42:47.25 minutos, en tanto la boliviana Stefany Coronado, era octava con 46:42.06 minutos.
En el relevo 4×100, el triunfo fue para Estados Unidos con 43.46 segundos, aquí la cuarteta brasileña no finalizaba la prueba. En la posta larga, el triunfo fue para los Estados Unidos con 3:30.42 minutos. En resumen, en el evento se implantaron dos récord mundiales, 59 nacionales.