Por José Ramón Fabelo Corzo
Cerramos este ciclo de trabajos sobre la participación cubana en el X Campeonato Mundial de Atletismo para Cadetes en Nairobi, analizando la labor individual de nuestros atletas.
La comitiva de la mayor de las Antillas mostró una elevada eficiencia competitiva. De los 13 atletas participantes, 11 lograron ubicarse entre los finalistas, del primero al octavo, 8 lograron medallas y 5 se titularon. Igualmente, 5 de ellos superaron sus marcas personales y otros 4 tuvieron rendimientos bien cercanos a ellas. Por si fuera poco, los cubanos fueron responsables de una mejor marca de todos los tiempos, dos records para la competencia y tres registros líderes del año.
Entre los avances más significativos estuvo el de Jordan A. Díaz, quien llegaba ya como amplio favorito en el triple salto con una marca personal 62 centímetros superior al que le seguía entre los inscritos. No satisfecho con ello, le agregó 64 cm más a su marca personal, hasta colocarla en un 17.30 que se convirtió en mejor marca histórica para la categoría, record para la competencia y, por supuesto, mejor marca del año. En todo un alarde de superioridad competitiva, le sacó un metro y 38 centímetros al ocupante del segundo lugar.
Amanda Almendáriz fue otra de las que creció notablemente en la competencia. Llegó con 68.38 en el martillo (5kg), la cuarta marca entre los inscritos, y terminó agregándole 2 metros y 74 centímetros, para un resultado de 71.12 que se convirtió record nacional y marca líder del año.
Un avance sustancial tuvo también el segundo saltador largo de la delegación, Lester A. Lescay, quien llevó su marca de 7.50 a 7.79, con 29 centímetros de incremento y un segundo lugar muy meritorio, tras el favorito Maykel Vidal, quien también le agrego 3 centímetros a su marca personal (de 7.85 a 7.88). La quinta atleta que mejoró su marca fue la triplista Zulia Hernández (de 13.14 a 13.29), lo que le valió el tercer lugar en su especialidad.
Una que no incrementó su marca personal, a pesar de la excelencia de su labor, fue la jabalinista Marisleisys Duarthe. Resulta que su resultado en Nairobi no fue marca personal, ni registro líder del año, ni mejor marca de todos los tiempos “por culpa” de ella misma. Sus 65.44 del 25 de mayo en el Barrientos en La Habana tienen todos esos méritos, mientras que sus 62.92 del Mundial son record para la competencia y segunda mejor marca de la historia.
La otra martillista cubana, Yaritza Martínez, llegó siendo líder del año, con 69.87, y prácticamente tiró lo mismo (69.75 – su segunda mejor marca), pero ello no le bastó para lograr el oro ante el “tirazo” de su compatriota Almendáriz. Ahora Yaritza tiene las segunda y tercera mejores marcas del año.
Silinda Morales se quedó cerca, a 32 centímetros, de su mejor marca (52.89 por 53.21) y ello no le afectó para lograr el oro. También cerca de su marca estuvo el triplista Yusniel Jorrín (15.88 por 16.02), pero en su caso esos 14 centímetros sí le costaron perder lo mismo la plata (15.92), que el bronce (15.89), en un cerrado duelo con los representantes de Ecuador y Colombia, quienes por muy poco relegaron al cubano al cuarto lugar.
Los otros cuatro atletas cubanos sí estuvieron bastante por debajo de sus mejores marcas. El discóbolo Ányel E. Álvarez, por ejemplo, llegaba con la segunda mejor marca previa entre los inscritos (62.75), quedó 482 centímetros por debajo (57.93) y ancló quinto. Igual lugar obtuvo la otra representante cubana de la jabalina, Melisa Hernández, quien llegaba tercera (55.98) y con 296 centímetros menos en la competencia (53.02) tampoco pudo acercarse a las medallas. La especialista en disco Melany Del P. Matheus no pudo controlar sus nervios en la final y fue eliminada al no marcar en sus tres primeras salidas, aunque tampoco en la fase preliminar estuvo del todo bien, quedando a casi cuatro metros de su mejor marca (48.30 por 52.22).
Pero la atleta que más por debajo quedó fue María de L. Calderín. Tenía el mejor tercer tiempo de inscripción (2:04.64), pero en las preliminares terminó tercera de su hit con 2:12.01 (su peor tiempo del año y a 7.37 segundos de su mejor marca) y en semifinales fue descalificada, aunque de todas formas se le vio “explotada” entrando de última. En su caso puede haber incidido negativamente los más de 1700 metros de altura de Nairobi, aunque, a decir verdad, era de cuestionar su forma deportiva: sus últimos 800 en La Habana fueron el 20 de mayo y su marca no fue demasiado buena: 2:09.01, mientras que la marca que la llevó al mundial era del 17 de marzo, muy alejada en tiempo. Pensamos que, para el momento del mundial, había otros atletas en mejor forma deportiva y con más posibilidades, como Pedro P. Gutiérrez, quien marcó 13.53 en 110 m/v el 15 de junio en La Habana, marca con la que se hubiera agenciado el bronce en Nairobi. O el caso de la triplista Thalía Pedroso, quien saltó 13.12 en su última confrontación el 16 de junio, marca personal que le hubiera dado el cuarto lugar en el Mundial. Parece necesario que en el futuro se le dé mayor importancia a los registros que se obtengan cerca de la competencia fundamental a la hora de integrar los equipos que han de participar en ella.
A pesar de una u otra posible falla, la actuación de este equipo de atletas Sub18 muestra los aires frescos que se respiran con la nueva directiva de la Comisión Nacional de Atletismo. Muchas cosas buenas podrían destacarse desde antes del mundial, como, por ejemplo, la elevada cantidad de atletas de esta categoría que estuvieron discutiendo un puesto al mundial. Como hemos señalado en otras ocasiones, la calidad no puede salir de otro lugar que no sea la cantidad. Es un asunto de pura dialéctica. El haber podido integrar un equipo de tan alta calidad de debe a una masa de aspirantes que ha sido la más amplia que recordamos en esta categoría.
Y, hablando de la nueva directiva, el excepcional resultado de las lanzadoras de martillo no puede ser ajeno a la presencia inspiradora de Yipsi Moreno en esa directiva. Hasta por la rutina de sus movimientos, estas chicas nos recuerdan a la multicampeona cubana.
Quedan cosas por hacer, potencialidades que explotar. Más adelante nos referiremos a las que observamos desde nuestra humilde posición de seguidores apasionados del atletismo cubano. Pero parece que nos vamos acercando a la senda correcta. Ojalá que la ruta iniciada por los cadetes sea seguida por los juveniles el año próximo y por los mayores un poco después. Es la lógica escalonada en que los resultados deben venir.
Mientras, dejamos a los lectores con esta tabla que resume la actuación de cada uno de los 13 atletas cubanos. Su ordenamiento en la tabla responde a los niveles de crecimiento (o decrecimiento) que observamos en Nairobi en relación con sus marcas precedentes.
Actuación individual cubana en el Campeonato Mundial Cadetes de Nairobi 2017
Atleta | Especialidad | Marca y lugar de inscripción | Resultado y lugar obtenido | Diferencia |
Jordan A. Díaz | Triple (M) | 16.66 / 1ro | 17.30 / 1ro PB, CR, WU18B | + 64 cm |
Amanda Almendáriz | Martillo (F) | 68.38 / 4ta | 71.12 / 1ra PB, RN, WU18L | + 274 cm |
Lester A. Lescay | Largo (M) | 7.50 / 4to | 7.79 / 2do PB | + 29 cm |
Zulia Hernández | Triple (F) | 13.14/3ra | 13.29 / 3ra PB | + 15 cm |
Maykel I. Vidal | Largo (M) | 7.85 / 1ro | 7.88 / 1ro PB, WU18L | + 3 cm |
Marisleisys Duarthe | Jabalina (F) | 65.44 / 1ra | 62.92 / 1ra CR | – 252 cm |
Yaritza de la C. Martínez | Martillo (F) | 69.87 / 1ra | 69.75 / 2da | – 12 cm |
Silinda O. Morales | Disco (F) | 53.21 / 1ra | 52.89 / 1ra | – 32 cm |
Yusniel Jorrín | Triple (M) | 16.02 / 2do | 15.88 / 4to | – 14 cm |
Melissa M. Hernández | Jabalina (F) | 55.98 / 3ra | 53.02 / 5ta | – 296 cm |
Ányel E. Álvarez | Disco (M) | 62.75 / 2do | 57.93 / 5to | – 482 cm |
Melany Del P. Matheus | Disco (F) | 52.22 / 3ra | 48.30-NM / 12da | – 392 cm |
María de L. Canderín | 800 m (F) | 2:04.64 / 3ro | 2:12.01-DQ / 16ta | + 7.37 seg |
Leyenda: PB – Mejor marca personal; CR – Record para la competencia; RN – Record nacional; WU18B – Mejor marca Sub18 de todos los tiempos; WU18L – Mejor marca Sub18 del año; NM – No marcó; DQ – Descalificado(a)
Gracias Fabelo. Qué pena q desaparezcan los mundiales para cadetes, no entiendo cómo competir al más alto nivel entre los de una misma categoría puede ser negativo a largo plazo. Ahí están los ejemplos de los fuera de serie q triunfaron en cadetes, junior y absolutos para desmentir esto. Respeto el criterio contrario de un trabajo anterior de Nápoles, pero me quedo con muchas reservas. Creo q lo económico es lo q ha pesado realmente a la hora de desaparecer este magno evento, más allá de lo q diga la Iaaf. Y qué decir entonces de los Juegos Olímpicos de la Juventud?? Y qué lamentable que sigamos tan mal en la pista, ya no solo en la velocidad…
Y ojo con la altura de Nairobi, nuestros atletas no se pueden desencantar si les demora igualar o superar las marcas alcanzadas allí, pues la altura pudo favorecer…
Gracias, Fabelo, por el excelente artículo.
A pesar de los nuevos aires, la enfermedad de tener en cuenta las marcas lejanas y despreciar las más recientes en relación con la competencia principal tiene método, posiblemente sea con intención para garantizar viajes a alguien.
Es que este mismo año ya se hizo para el Mundial de Relevos, al que llevaron a los atletas que supuestamente habían hecho buenas marcas anterioremente, para ello se despreciaron las marcas logradas de la Copa Cuba que era la competencia de clasificación más cercana al mundial. Quién va a creerse el cuento contado a la prensa explicando esa decisión, que por tan ilógica debería llamarle la atención a cualquiera, para por lo menos inventar un cuento más creíble.